El día que Pedro Sánchez se rebeló ante el Grupo Prisa y Antonio García Ferreras

Octubre de 2016 fue clave a nivel político para Pedro Sánchez, que abrió el mes entonando el ‘no es no’ a la investidura de Mariano Rajoy y lo cerró denunciando ante Jordi Évole las presiones que había sufrido por parte del establishment patrio.

«Sánchez ha resultado no ser un dirigente cabal, sino un insensato sin escrúpulos que no duda en destruir el partido que con tanto desacierto ha dirigido antes que reconocer su enorme fracaso», editorializaba El País el 1 de octubre de 2016.

El diario entonces dirigido por Antonio Caño lo atacaba con saña: «Hemos sabido que Sánchez ha mentido sin escrúpulo a sus compañeros. Hemos comprobado que sus oscilaciones a derecha e izquierda ocurrían únicamente en función de sus intereses personales, no de sus valores ni su ideología, bastante desconocidos ambos. Admitimos no tener gran confianza en su capacidad de rectificar. Pero queremos hacer, pese a todo, un esfuerzo final y llamar a Sánchez a recapacitar: que medite sobre el daño ya causado a su partido y que se vaya para no causarle todavía más».

Sánchez, tras abandonar la secretaría general del PSOE, se vengaba del diario del Grupo Prisa el 31 del mismo mes en ‘Salvados’ al explicar que «determinados medios progresistas como El País me han dicho que si hubiera habido un acuerdo entre PSOE y Podemos, lo criticarían e irían en contra». «La línea editorial de El País ha sido abusiva e incluso insultante en lo personal, no solamente en lo político», añadía.

Ese 2016 fue tumultuoso para el socialista, ya que Jesús Maraña explica en el libro ‘Al fondo a la izquierda’ (Planeta) que protagonizó una pelea con Antonio García Ferreras con el polémico editor Mauricio Casals como protagonista directo. «En un momento determinado del almuerzo, Sánchez levanta la voz y se dirige a Ferreras: ‘¿Tú vas a por mí! Sé que estás investigando a mi mujer y a mi suegro. ¡Mírame a los ojos y dime que no es verdad!’. El periodista se pone en pie y responde en el mismo tono: ‘¿Cómo dices? ¡Eso es absolutamente falso! Dinos tú quién te ha ido con ese cuento». (…) ‘Es mentira que nadie de mi equipo esté investigando eso -insiste Ferreras-, y además, si no tiene nada que ver con tu dedicación política, a mí me importa un pito», explica Maraña.

En 2024 Sánchez vuelve a dolerse de golpes mediáticos, en este caso por los excesos de lo que llama ‘Fachosfera’ contra su mujer Begoña Gómez (que, pese a haber sufrido una salvaje campaña de la caverna, nunca debió firmar una carta de recomendación ni enviar el célebre correo electrónico a El Confidencial).

En su apoyo han salido Maruja Torres, Pilar del Río, Rosa María Artal, Maruja Torres, Xosé Manuel Pereiro, Javier Valenzuela, Silvia Intxaurrondo, Manuel Rivas, Cristina Fallarás o el propio Jesús Maraña, que han firmado un comunicado de apoyo.

Sánchez
Pedro Sánchez y Felipe VI.

«El ataque de la ultraderecha mediática y judicial contra la esposa del presidente del Gobierno es un nuevo intento de subvertir la voluntad popular expresada en las urnas mediante medios ilícitos. La campaña de bulos, falsedades y acoso contra los miembros de los dos últimos gobiernos de coalición y otras fuerzas progresistas e independentistas, coordinada y financiada por la derecha política, mediática, empresarial y judicial, atenta contra las bases mismas de la democracia parlamentaria, y deja inerme al Estado de Derecho», explican.

Miles de periodistas han firmado el comunicado que dice que «los gobiernos se eligen y se cambian en las urnas y en el Parlamento». «No al golpismo judicial y mediático. No a la máquina del fango», añaden.

GUIÑOS EN FAVOR DE PEDRO SÁNCHEZ

La reivindicación de la democracia es compartida por la extraordinaria película italiana ‘Siempre nos quedará mañana’ (ya en cines) y por Pedro Almodóvar, que rompe una lanza en favor del presidente en eldiario.es: «Este momento merece un ¡Basta ya! rotundo, furibundo. Qué es lo próximo que ocurrirá, tanto si dimite Sánchez como si se queda. No quiero ni pensarlo. No puedo. En estos momentos, mi corazón está con el presidente y su familia».

Wyoming también sale de la cueva para lanzar un guiño al primer ministro desde Infolibre: «Como ciudadano alarmado por las consecuencias de acciones judiciales que pueden y pretenden acabar con un Gobierno legítimamente constituido, como ha ocurrido últimamente en Brasil o en Portugal, y ahora estamos viendo con un descaro absoluto en nuestro país, hago mío su deseo de vivir en paz dentro del sistema democrático que los españoles nos hemos dado».

Y Jordi Évole sentenciaba este sábado en La Vanguardia: «Los que disfrutan con la aniquilación del otro son los que abrirán botellas de champán si Sánchez anuncia el lunes su dimisión. Son los que no soportan la pluralidad de España ni una sociedad más justa, los que reinan en la sociedad de la mentira organizada. Todos esos son los que están a punto de ganar».