Si hubiese que escoger un supermercado perfecto, Lidl sería un claro candidato. Cuando visitas un establecimiento de esta cadena alemana sabes que encontrarás todo aquello que necesitas, empezando por su enorme gama de alimentación y productos para el hogar, pero sin olvidarnos de productos como las sandalias de mujer que van a arrasar esta primavera, chollos para renovar tu espacio gaming y hasta un original invento que sustituye a la fregona.
El catálogo de Lidl también incluye electrodomésticos, y en concreto un artículo que está siendo la comidilla de todos sus clientes: nada menos que un mini frigorífico low cost, la opción perfecta para tus vacaciones de Semana Santa, el puente de mayo o incluso el verano. Las prestaciones de este producto hacen que esté volando de las estanterías, ¡pero no te preocupes! Te vamos a explicar cómo conseguir uno de estos frigoríficos desde la comodidad de tu hogar, además de explicarte por qué necesitas conseguirlo cuanto antes.
1LAS VENTAJAS DE TENER UN MINI FRIGORÍFICO
Seguro que alguna vez has ido a un hotel y te has fijado en la mini nevera que hay en la habitación, ¿verdad? Los hosteleros eligen estos aparatos por sus prestaciones, ya que conservan frescos aperitivos y bebidas consumiendo muy poca electricidad. ¡Y son muy estéticos!
Tener tu propio mini frigorífico significa que llevas una nevera portátil contigo. Es un electrodoméstico que pesa poco y encaja en cualquier espacio, basta con tener un enchufe cerca y listo. Te vendrá de maravilla cuando vayas de vacaciones al pueblo, a una zona aislada o incluso de camping, sobre todo de cara a las olas de calor que se avecinan para este próximo verano.
