Una de las series más esperadas por todos durante años es la serie de El Señor de los Anilos: los Anillos de Poder. Esta serie creada por J.D Payne y Patrick McKay para Amazon Prime Video, es una precuela de las películas. Para ello, se invirtieron 250 millones de dólares para comprar los derechos, con 1000 millones de dólares de presupuesto total para 5 temporadas.
Con esto se esperaba una serie muy exitosa y, aunque es cierto que ha tenido audiencia, ha quedado por debajo de las expectativas. De hecho, ha enfadado a los fanáticos más acérrimos de la misma. ¿Por qué ha ocurrido esto? Hoy analizaremos por qué amamos la trilogía original, pero no nos gusta tanto la serie.
La polémica con la raza
Una de las mayores polémicas con respecto a Los anillos de poder tiene que ver con la raza de algunos protagonistas. La presencia de elfos y enanos de raza negra ha causado polémica en algunos fans, que aseguran que no es fiel al libro original y que se trata de inclusión forzada. Otros en cambio, lo han justificado y han acusado de racistas a los que se quejaron.
En realidad, Tolkien nunca especificó que los elfos no podían ser de raza negra, pero él no ver a ningún elfo con este tono de piel en la obra original ha mosqueado a los fanáticos más fieles. Su argumento es que Tolkien basó la historia en una Inglaterra mitológica donde todos era caucásicos, aunque realmente en el texto no dice específicamente el tono de piel de los elfos y los enanos.
