Mientras la política de Reino Unido sigue siendo un caos, el Estado aún realiza inversiones para facilitar la implementación del transporte público sustentable. Después de todo, con o sin Brexit y sin importar cuantos conservadores pierdan el puesto de Primer Ministro en los próximos meses, los ingleses entienden que es necesario transformar su sistema si quieren cumplir con los objetivos de sostenibilidad que se plantearon ellos mismos. Algo que Renfe e Irizar ven como una oportunidad.
Lo llamativo es que han recurrido a dos marcas españolas para esta transformación. Por un lado, la estatal Renfe, que está desarrollando un proyecto a gran escala con la empresa Grand Union Trains que la podría convertir en una de las más importantes del negocio ferroviario en ese país; por otro, la empresa vasca Irizar acaba de firmar un acuerdo con Go-Ahead de Londres para proporcionar los 20 autobuses eléctricos que alimentarán una de las líneas clave de la capital inglesa.
Es una señal más de una entrada importante del transporte español a otros territorios. Arabia Saudita, Estados Unidos y Latinoamérica empiezan a ser importantes para las empresas españolas de transporte, que ven con buenos ojos una posible entrada al territorio francés.
INGRESOS EN LIBRAS
Lo cierto es que las apuestas para entrar en Reino Unido parecen bastante buen negocio en ambos casos. Para la empresa de autobuses, que tiene fábricas también en México, Brasil y Sudáfrica, es una oportunidad de seguir colocando sus autobuses en ciudades clave de Europa. Un acuerdo tanto con el Ayuntamiento de Londres como con la empresa Go Ahead puede ser bastante valioso a la hora de abrir puertas en otros mercados y de diversificar las divisas en las que reciben ingresos.
El acuerdo lo cierto es que deja que su marca se vea en algunas de las calles más importantes de Londres. La línea 358, donde trabajaran sus autobuses, une el sur de la ciudad con la zona de ‘Crystal Palace’ y es clave para el desplazo de y hacia eventos. Además, será la primera línea de autobuses completamente electrificados en la capital británica, otro punto a favor del proyecto de cara al ayuntamiento y los inversores.
Renfe puede celebrar el espacio que sigue ocupando fuera de España
Por su lado, la estatal Renfe puede celebrar el espacio que sigue ocupando fuera de España. En el caso Británico serán los encargados de la principal vía ferroviaria entre Inglaterra y Gales. Esta conexión de alta velocidad no solo es una buena experiencia europea para una empresa que sigue peleando para consolidar su entrada en suelo francés, más allá de las dificultades que se han encontrado por las políticas proteccionistas que ha mantenido el gobierno actual.
Pero aun si no lograran que este proyecto sirviese de llave a otros territorios, los ingresos que saldaran de estos proyectos no son nada despreciables. Aún con su caída reciente, la Libra sigue siendo valiosa, y, probablemente, tras la salida de Liz Truss, la inestabilidad política de los británicos se calme en el corto plazo. Puede que, al menos, por un par de meses.
EL TRANSPORTE ESPAÑOL EN EL MUNDO
Lo cierto es que la liberalización de las vías de tren parece haber dado la señal de salida para que las empresas españolas de transporte busquen hacerse hueco en el exterior, como aquí lo han hecho franceses e italianos. De hecho, Renfe ha reforzado sus negocios en Estados Unidos y Latinoamérica y será uno de los principales responsables del metro de Quito.
Alsa ha firmado para servir como proveedor de autobuses de unas rutas más importantes del país de Oriente Próximo
Pero no es solo Renfe. Al igual que la estatal ferroviaria ha asumido la línea de alta velocidad que conectará la Meca con el resto de Arabia Saudita, la empresa de autobuses Alsa ha firmado para servir como proveedor de autobuses de unas rutas más importantes del país de Oriente Próximo. Son inversiones que anteriormente existían para las empresas estatales de transporte, pero que poco a poco se han convertido en piezas clave de su negocio, de hecho Renfe ha asegurado que espera que en 2023 sea una décima parte de sus ingresos.
CONTROVERSIAS DE RENFE DENTRO DEL PAÍS
Aunque han puesto el ojo fuera del mercado local, en la estatal ferroviaria española han tenido que enfrentar varias controversias internas. Ignorando casos particularmente estrambóticos como el retraso causado por una despedida de soltero o bajar del tren a una clase de 22 niños, han tenido que lidiar con varios problemas este año, quizás ligados justamente a que sus números de pasajeros han aumentado.
Los retrasos del servicio de cercanías, que se reportan una mañana si y otra también en las redes sociales, y los cierres temporales de algunas rutas, han sido vistos con suspicacia por algunos usuarios. Sin embargo, desde el ministerio de Transporte y desde la propia empresa se sigue apostando por el servicio, y ya se ha confirmado que el abono aún será gratuito en 2023.
De cualquier modo, tampoco parece que la estatal deba preocuparse. Los datos del sistema ferroviario son positivos, y aunque volver a las cifras de 2019 sigue siendo un reto para el año que viene, tampoco se sienten demasiado inalcanzables.