Quien más y quien menos, todo el mundo conoce las alitas de pollos, las ha comido alguna vez o incluso las ha cocinado. Ya sean al horno o fritas, se trata de un plato bastante económico y que suele gustar a todo el mundo, también a los más pequeños de la casa. Pero, dada su popularidad, también existen recetas que le dan un toque diferente al plato, y con el cual es posible sorprender a la familia y a los amigos. Es el caso de las alitas de pollo al limón.
¿Quieres saber cómo prepararlas para que queden lo más sabrosas y crujientes posible? Pues no pierdas detalle, porque te lo contamos.
Cómo cocinar unas alitas de pollo al limón
Es importante, antes de empezar, que las alas de pollo estén completamente limpias. Por eso es recomendable lavarlas un poco debajo del grifo, secarlas, y también asegurarse de que no tengan restos de plumas. Esto suele ser bastante frecuente sobre todo cuando se compran en las típicas bandejas que están en los supermercados.
Mientras, se puede ir calentando el horno. A medida que este va poniéndose en funcionamiento, para lo cual no suele ser necesario más de un ratito, dependiendo de cada electrodoméstico, se colocan las alas en una bandeja para horno.
