El tabaco, aunque legal, no deja de ser una droga que produce una adicción incluso muy superior a otras. La prueba es lo que cuesta dejar de fumar. De hecho, muchos de los que intentan dejarlo, fracasan: o bien son incapaces siquiera unos días de olvidarse del tabaco o bien o dejaron y de repente un día de estrés, ansiedad, preocupación o bien por influencia de la vida social, volvieron a caer y no fue precisamente algo puntual. Al final ese ansia es uno de los mayores obstáculos a la hora de dejar el tabaco o al menos fumar con menos frecuencia y cantidad. Veamos como controlarlo y así, en el caso que no puedan dejar de fumar totalmente, puedan conformarse con fumar un cigarrillo al día o pocos a la semana. Algo es algo.
7DISFRUTA DE LOS SITIOS CERRADOS
Es probable que mientras veías una película en el cine o visitabas un museo te aparecieran unas ganas tremendas de un cigarrillo. Esto te impedía disfrutar por completo de la actividad al tener únicamente en la cabeza la necesidad de fumar. Los espectáculos o las exposiciones te permitirán tanto distraerte como entretenerte. Esta es una de las ventajas, que no tienen que ver con la salud pero sí con la vida, que conseguirás al fumar mucho menos y quizá lograr dejar de fumar.