Coche de segunda mano o nuevo

El mercado de la segunda mano en el motor está creciendo considerablemente, no obstante, la compra de vehículos nuevos no deja de ser la prioridad para todas aquellas personas que quieren renovar su coche. En ambos casos, una buena opción para comprar coches nuevos y coches de segunda mano es el grupo de concesionarios de Murcia Grupo M Gallego. No obstante, siempre es aconsejable saber cuáles son las principales diferencias entre ambos tipos de compra.

Porque los automóviles nuevos gozan de ciertas características y, en algunas ocasiones, son diametralmente opuestas a las de los automóviles de segunda mano. Son precisamente esas características las que determinan cuál es la opción a seguir cuando se plantea la compra. Pero, ¿cómo decidirse entre una u otra? Es la gran pregunta de todo comprador, y la respuesta puede ser bastante fácil de averiguar.

¿Qué comprar: coche nuevo o coche de segunda mano?

El gran dilema de todo comprador cuando se acerca el momento de estrenarse en el motor, o de renovar su vehículo, es saber si optar por un modelo nuevo o uno de segunda mano. Hay claras diferencias entre los vehículos de ambos frentes, y aquí vamos a repasar las más destacables para todo aquel que no tenga claro qué dirección seguir.

Una cuestión de ahorro

Generalmente, el precio de un coche de segunda mano siempre será más bajo que el precio de un coche completamente nuevo. El kilometraje y el desgaste del vehículo son mayores en la segunda mano, y eso siempre tiene sus consecuencias en el precio a pagar. Ahora bien, ese no es el único ahorro que ofrecen este tipo de compras, porque también se ahorran las visitas iniciales habituales en los talleres cuando se compra un coche nuevo.

Cabe decir, también, que un coche nuevo suele tener un seguro más caro que uno seminuevo. El ahorro es mayor de nuevo en el caso de los vehículos usados, ya que las aseguradoras establecen cuotas más bajas incluso con las mayores coberturas. Por ejemplo, un conductor con la misma antigüedad, con aparcamiento en garaje y sin accidentes o incidencias, siempre pagará menos por el seguro de un coche de segunda mano que por uno recién sacado del concesionario.

¿Cuánto dura todo el proceso de compra?

El proceso de compra de un coche de segunda mano es particularmente breve. De hecho, se pueden firmar los papeles del contrato de compra y cerrarla prácticamente al momento, lo único que puede alargar esta espera es la necesidad de consultar con uno o varios mecánicos para corroborar el buen estado del vehículo o incluso negociar su precio en base a eso.

Con la compra de un coche nuevo, en cambio, es necesario esperar a que el modelo solicitado llegue al taller. Después, deben prepararse papeles para el préstamo que lo abone, establecer las condiciones para el seguro (en caso de que vaya ligado al concesionario) y esperar a realizar varios trámites para determinar la titularidad del automóvil. Generalmente, siempre es más rápido comprar un coche de segunda mano. Se puede ver, negociar, pagar y tener en propiedad en cuestión de horas, no de días.

Visitas a los talleres

Un coche nuevo, aunque requiera unas primeras revisiones obligatorias en función del fabricante al que pertenece, suele tener garantizados unos primeros años de vida con menos visitas a los talleres. El gran problema de la segunda mano en este frente es que pueden disponer de algún tipo de garantía para el primer año tras la compra, no obstante, siempre hay cierta inseguridad porque se desconoce el uso previo que se le ha dado y el malestar de sus componentes en general.

Aun así, y como se suele decir, la compra de un coche siempre es una «lotería». Un coche nuevo puede pasar más veces por el taller en menos tiempo que uno de segunda mano, y viceversa. En este frente, siempre es aconsejable tener una buena garantía y tener claro que se puede llegar a reclamar a los vendedores en caso de problemas mayores.

Disponibilidad de modelos y/o marcas

Otro punto especialmente favorable para los coches de segunda mano es que sus catálogos son mucho más amplios y flexibles. Los coches nuevos suelen tener una disponibilidad más limitada, porque siempre hay modelos que quedan descatalogados o dejan de fabricarse y, por ende, dejan de venderse en concesionarios. A diferencia de este caso, los seminuevos pueden ser modelos que lleven años sin venderse como nuevos o que ni siquiera se fabriquen.

Para quienes quieran comprar un modelo de coche muy concreto, la segunda mano suele ser mejor aliada. Hay una disponibilidad mucho mayor y, además, los precios suelen ser más bajos.

En el caso de querer conocer más diferencias y/o contrastes entre los coches nuevos y los seminuevos, recomendamos echar un vistazo al extenso desglose realizado por el portal Test Coches, especialistas en el sector del motor.