La nueva regulación del Gobierno en la ley del Mercado de Valores ha puesto contra las cuerdas a las Sociedades de Inversión de Capital Variable (sicavs). Un altísimo porcentaje, estimado en más de 2.000, cerrarán sus puertas por este cambio normativo que entrará en vigor el próximo 1 de enero. Sin embargo, un pequeño reducto de estas sociedades trata a duras penas sobrevivir en el mercado y permanecer con su estatus actual. Éste no es otro que tributar al 1%, como los fondos de inversión.
Para poder pagar esta parte mínima de impuestos, el Gobierno ha impuesto una serie de requisitos que hacen prácticamente inviable la existencia de estos vehículos de inversión. Entre ellos, los 100 accionistas mínimos que debe tener una sicav tendrán que aportar a la sociedad cerca de 2.500 euros cada uno, con el fin de alcanzar la aportación mínima de 247.500 euros. Todo ello, si quieren mantener una tributación similar a la de los fondos de inversión. En caso contrario, el gravamen alcanzará el 25%, como corresponde a las sociedades anónimas.
Las grandes fortunas no tienen problemas a la hora de encontrar estos socios. Y es que, la banca y las gestoras de grandes patrimonios han propuesto combinar los socios entre sí. Y es que, 2.500 euros es calderilla. Sin embargo, las sicavs más pequeñas se las están viendo y deseando para encontrar estos socios. Una de estas sociedades de inversión, que cuenta con menor patrimonio y que cotiza desde hace años en el mercado, trata aún de captar el número suficiente de socios. «El cierre impuesto a las sicavs no tiene ni pies ni cabeza«, ha apuntado uno de ellos a MERCA2.
POR QUÉ OBLIGAN SOLO A LAS SICAVS, LA GRAN PREGUNTA DE LOS PEQUEÑOS SOCIOS
De hecho, su principal queja se centra en la diana del Gobierno sobre estos vehículos de inversión. «Por qué a nosotros nos obligan a invertir 2.500 euros y no a los partícipes de los fondos, que tributan exactamente igual», ha reflexionado.
Esta caza a las sicavs no es de ahora. El Ejecutivo y partidos menos liberales han tachado a estas sociedades de ser un privilegio de las grandes fortunas. Como si los grandes fondos de inversión no los fueran. El cambio del Gobierno, además, golpea especialmente a las más pequeñas de estas sociedades. Hasta ahora, la mayoría de las sicavs tenían un gran socio capitalista, que superaba el 99% de la inversión total, mientras el resto de los partícipes apenas ostentaba el 0,1%. Éstos son los conocidos como ‘mariachis’, hombres de paja con nula capacidad de gestión en la sicav.
Con este cambio normativo, tan sólo se ha incrementado el capital de los socios ‘mariachis’ a poco más del 10%. Es decir, tampoco tienen poder decisión ni de gestión, aunque las decisiones se tomen en conjunto. Y es que, el capital mínimo requerido para conformar una sicav alcanza los 2,4 millones de euros. «Son mariachis un poco más grandes», relata el socio consultado.
EL 1 DE ENERO CAMBIA EL RÉGIMEN DE TRIBUTACIÓN EN LA SICAVS
Estos cambios fueron aprobados en pleno verano, pero entran en vigor este próximo 1 de enero. Por este motivo, las sicavs que quieran continuar su actividad no tendrán más remedio que encontrar a los socios cuanto antes. El resto, la inmensa mayoría, ya está preparando el cierre y la reconversión hacía los fondos de inversión. El cambio desde estas sociedades patrimoniales a los tradicionales fondos no dejará un solo euro en las arcas públicas. Los socios estarán exentos, por lo que los actuales accionistas no entienden este mejor tratamiento fiscal para los fondos.
Antes del 1 de enero, las sicavs tendrán que tramitar sus requisitos si quieren tener una fiscalidad más beneficiosa. «Los trámites para el cierre se amplían al 2023», según fuentes consultadas por el sector. Así, la Comisión Nacional del Mercado de Valores deberá contrastar una a una que todas cumplen con estos requerimientos. Si la sicav no los alcanza, automáticamente, la sociedad tributará al 25% en el impuesto de Sociedades.
LA BANCA MIRA CASO POR CASO PARA OFRECER ALTERNATIVAS A LOS SOCIOS DE LAS SICAVS
El golpe directo no sólo se lo llevarán estas sociedades, sino también los gestores de patrimonio dedicados a las sicavs. Para evitar el zarpazo de Hacienda, los socios reinvertirán la liquidación del vehículo en fondos de inversión con el fin de dar a conocer públicamente las ganancias acumuladas. Como ocurre con los fondos, los socios de las sicavs no tributarán hasta no vender sus participaciones al mercado.
De esta forma, quedarán muy pocas sicavs, perseguidas por una regulación asfixiante desde 2008. Tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, el PSOE ha tratado de incrementar la fiscalidad de estas sociedades de inversión. Ha sido una década después cuando se ha llevado a cabo este hachazo, eso sí, sin elevar directamente la fiscalidad ante el temor de una huida de capitales.
La banca, por su parte, está buscando soluciones a estos socios. «Se mira caso a caso y se les da distintas alternativas», han afirmado fuentes financieras consultadas.
Se está hablando desde hace tiempo con los tenedores de estas sicavs para explicarles la situación
«Se está hablando desde hace tiempo con los tenedores de estas sicavs para explicarles la situación y ofrecerles propuestas adecuadas para sus inversiones, en función de sus características y de sus propios intereses», han destacado otras fuentes financieras.
«Hay clientes que optan por mantener la sicav y hay quienes tienen claro proceder a la disolución de la misma, y trasladar su inversión a un fondo de fondos, o a una gestión patrimonial delegada o recibir servicios de asesoramiento independiente», han destacado.
EL CAPITAL RIESGO IRRUMPE COMO SOLUCIÓN A LOS FONDOS
Entre ellas, la inversión en fondos afincados en Luxemburgo o bien otros vehículos de inversión como el capital riesgo. Éste último está viviendo un verdadero auge. La inversión, según los últimos datos, ha aumentado en casi un 20% en este 2021, tras un año muy dulce en 2019, cuando se alcanzaron los 8.000 millones. Se vuelven a ver los 5.000 millones de euros en este año y se espera que el incremento sea superior para el 2022.
La voz cantante de estos fondos en España la llevan Platinum, Oakley y Apax. Sin embargo, el apetito por la rentabilidad ha hecho incrementar las rondas de financiación de las startups que prometen grandes números. Y es que, estas venture capital examinan las cifras y las proyecciones de Ebitda y resultados financieros antes de mover un solo euro. «Juegan sobre seguro«, ha dicho una fuente conocedora de estas rondas de financiación. Así, a partir de 2022 se conocerá el número exacto de las sicavs supervivientes ante este nuevo cambio normativo.