Los precios de la energía siguen subiendo, y es raro el día que no logran alcanzar un nuevo máximo histórico. Con el mayor gasto energético suben todos los demás productos, ya que vivimos en una sociedad dependiente de la electricidad para producir todo lo demás (alimentos, vehículos, electrodomésticos, etc.). También los combustibles han subido, como la gasolina y el diésel.
La situación de la pandemia y el aumento de los gastos no está ayudando para nada a las familias con menos ingresos. Sin embargo, existe algo de esperanza, ya que puedes buscar maneras para reducir el gasto familiar y de conseguir el combustible algo más barato, y ahorrarte unos buenos euros cada mes.
1Comprar un coche híbrido o eléctrico: ¿buena opción?
Cuando los combustibles fósiles suben de precio, una gran opción es optar por un vehículo híbrido o uno totalmente eléctrico ya que, aunque a veces sean algo más caros, lo que ahorras en combustible compensará a la larga.
Sin embargo, ahora con la subida de la luz, los híbridos enchufables y los eléctricos 100% han dejado de ser una gran opción, por lo que hay que buscar alternativas para tratar de conseguir bajar, al menos, la factura de gasolina o diésel mensual.
