En el mundo del emprendimiento se está popularizando la conocida como teoría de la ilusión de Zuckerberg, que puede explicar la razón por la que muchos emprendedores acaban en la ruina al dejarse llevar por falsas ilusiones.
Se trata sencillamente de una forma más de autoengaño. Cuando nos creemos que nuestras ideas son mejores de lo que realmente son y nos dejamos llevar por esa ilusión en lugar de prestar más atención a lo que ocurre a nuestro alrededor para poder ver la realidad.
10Siempre con los pies en el suelo

Mantén los pies en el suelo y comienza a trabajar en un proyecto que gire en torno a tu idea. Con tiempo, y haciendo una buena labor de investigación, llegarás a la conclusión de si tu negocio podría tener éxito o no.
Con una buena planificación y siendo objetivo, no hay razón para que no alcances las metas que te hayas propuesto, siempre y cuando estas sean realistas.