El alquiler vacacional de Madrid se reivindica frente a los «malos actores»

A pocos días de que el Ayuntamiento de la capital apruebe la nueva regulación que afecta a las viviendas turísticas, el presidente de Madrid Aloja, Adolfo Merás insiste: el sector reclama “una regulación exigente que nos proteja de los malos actores”. La asociación de particulares, gestores y propietarios de alquiler vacacional recuerda el impulso que puede propiciar este segmento a la reactivación del turismo y el efecto dinamizador de la vivienda turística que, en Madrid ejerce, además, de “redistribuidor del gasto de los turistas a otras ciudades vecinas como Toledo o Ávila”.

En este sentido, el alquiler vacacional supedita su consolidación a la modificación del Plan General de Ordenación Urbana que el Ayuntamiento de Madrid aprobará en un par de semanas, tal y como ha confirmado la vicealcaldesa, Begoña Villacís, en el Debate sobre el Estado de la Ciudad. El sector destaca la innegable contribución de esta modalidad alojativa a que la capital de España sea la quinta ciudad europea con mayor número de reservas, según Eurostat.

Según los últimos datos publicados por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat), el ‘top 5’ arranca con París seguida de Barcelona, Roma y Lisboa. En este sentido, el alquiler vacacional, que contribuye a catapultar a Madrid al ranking de las cinco urbes más visitadas, pide acabar con la incertidumbre jurídica que rodea al sector. En concreto, Madrid sumaría 8,3 millones de noches reservadas por los visitantes a través de las principales plataformas (Airbnb, Booking, Expedia y Tripadvisor).

La seguridad jurídica en el marco del alquiler vacacional supondrá un revulsivo para reactivar el turismo y recuperar los 1.810 millones de euros que aportó al crecimiento económico de la capital en 2019, según el gasto medio diario del INE, lo que se hace más necesario si cabe tras la alerta emitida por la Agencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD), que ha señalado que la pandemia podría reducir entre el 1,4% y el 2,3% el PIB español para 2021 por su impacto en el sector.

En este marco, la asociación sectorial Madrid Aloja, como kilómetro cero del alquiler vacacional urbano con casi una de cada cuatro viviendas de uso turístico, pide al consistorio capitalino una regulación que devuelva la seguridad jurídica al sector, garantice la convivencia entre turistas y vecinos, reactive el turismo y acelere la recuperación económica.

Por ello, ha presentado un plan de acción que pretende, entre otros objetivos, combatir la sobreocupación y lograr una oferta de alquiler vacacional centrada en la sostenibilidad y la calidad, en línea con el Plan Estratégico de Turismo 2020-2023 puesto en marcha por el Ayuntamiento.

Dentro de la batería de medidas que recoge el plan de acción, destaca el censo de viviendas turísticas, con un sistema de plazas limitado -de acuerdo a criterios objetivos- para regular el número de viviendas y limitar a cuatro de cada diez el número de nuevas viviendas turísticas en edificios. Por encima de este porcentaje, recomienda que se tramite el cambio de uso a Apartamento Turístico de todo el edificio.

Según Merás, “el alquiler vacacional tiende la mano a la Administración y al resto de los agentes turísticos para que los buenos resultados se repitan y se consoliden para que Madrid siga siendo uno de los destinos con mayor proyección internacional». La nueva normativa debe tener en cuenta este «modelo de turismo de calidad y sostenible cada vez más demandado y que, sin duda, ha venido para quedarse en la capital y en todas las ciudades punteras del mundo”.

A tan sólo unos para que vea la luz la nueva regulación, Madrid Aloja insiste en abogar por una regulación más exigente para devolver la seguridad jurídica al sector frente al último Plan de Hospedaje aprobado por el anterior Gobierno municipal, así como contribuir a la reactivación del turismo y a asentarlo como base sobre la que mejorar el modelo productivo.

Para ello, defiende reforzar el diálogo y ampliar el consenso entre los distintos actores a través de un pacto sectorial que incremente la competitividad de nuestro país frente a otros destinos. Todo ello desde el equilibrio y el fair play.

DEPÓSITO DE GARANTÍA

Para garantizar el turismo de calidad, Madrid Aloja llama también a luchar la sobreocupación, fijando un límite en el número de huéspedes por vivienda para acabar con los problemas originados por su acumulación e imponiendo sanciones a las plataformas que recojan anuncios con ocupaciones por encima de las permitidas, a los gestores que anuncien más de las autorizadas o a los usuarios irresponsables con el número de ocupantes.

Asimismo, la asociación propone la creación de un depósito de garantía proporcional al número de huéspedes. Y es que facilitar la convivencia entre todos se ha articulado como uno de los ejes prioritarios de esta propuesta de regulación, pese a que solo un 3,5% de los madrileños considera las viviendas de alquiler vacacional como un problema de la ciudad, según la Encuesta de Calidad de Vida y Satisfacción con los Servicios Públicos del Ayuntamiento de Madrid de 2019.

En esta línea, el alquiler vacacional también plantea otras medidas como la instalación de sistemas de controles de ruido y vigilante nocturno para garantizar el descanso de todos, el acceso digital -sin llave física- al inmueble o la creación de la Oficina de Servicio de Mediación y Convivencia para que los vecinos se sientan escuchados y atendidos; una medida que ya ha demostrado en otras urbes más de un 90% de eficacia para resolver los problemas más comunes.

El alquiler vacacional se postula como motor para acelerar la recuperación económica, sobre todo, a la vista de su efecto tractor en sectores tan damnificados por la pandemia como el comercio o la hostelería, o incluso en localidades y provincias aledañas como distribuidor territorial del gasto.

María Castañeda
María Castañeda
Redactora de MERCA2 de empresas y economía; especializada en energía, sostenibilidad y turismo.