A la hora de emprender, elaborar un plan de negocio es esencial. Este documento te servirá como guía para tener en cuenta tus objetivos y las acciones que debes llevar a cabo para conseguirlos. Pero, a la vez, también te resultará útil si quieres acceder a subvenciones públicas o necesitas financiación externa.
El plan es algo así como el esqueleto de tu proyecto. Con solo mirarlo un experto ya puede saber si lo que tienes en mente es o no viable. De hecho, una de las razones para elaborarlo es que tú mismo descubras si tu idea tiene o no posibilidades de éxito. Pero, cuidado, porque puede que tu plan no esté todo lo bien elaborado que debería, lo que puede estar haciendo que no consigas inversores o que no avances en la puesta en marcha de tu proyecto. Por eso, es hora de mejorarlo.
5Prepara un plan de contingencia
Lo decíamos antes con respecto al plan de fuga, a la hora de emprender tienes que valorar bien todos los posibles escenarios que se pueden dar. Por eso, en tu plan de negocio no puede faltar un conjunto de medidas a adoptar ante las contingencias. Son esas que te van a ayudar a seguir adelante si algo va mal.
Es una especie de plan B para garantizar la pervivencia de tu negocio. Esto le da mucha confianza al inversor y, además, te puede servir de gran ayuda si en un futuro resulta que no todo va tan bien como pensabas y tienes que tomar decisiones estratégicas de forma urgente.
