Existen muchas formas de emprender. En la mayoría de los casos los nuevos profesionales buscan clientes más o menos estables con los que poder establecer una relación a largo plazo y tener así asegurado un cierto volumen de trabajo. Pero la sociedad cambia y las formas de trabajar también lo hacen. Un buen ejemplo de ello es que cada vez son más los profesionales que optan por trabajar en la conocida como gig economy.
Esta forma de trabajar está transformando el mercado laboral. Son muchas las empresas que prefieren parcelar su trabajo en pequeñas tareas que pueden asignar a profesionales externos, lo que obliga a los emprendedores a adaptarse a esta forma de trabajar si quieren triunfar en el mercado actual. Veamos con más detalle qué supone.
Características de la gig economy
Se trata realmente de minijobs, encargos que normalmente tienen que hacerse dentro de un plazo concreto y en los que no existe exclusividad entre la empresa y el profesional. Permite una deslocalización total de los servicios, ya que el profesional suele trabajar siempre de forma remota y en la mayoría de los casos desde su domicilio.
Es una forma de trabajar que aporta mucha flexibilidad, pero que está teniendo un fuerte impacto sobre el mercado laboral. Las empresas son cada vez más conscientes de que pueden dejar en manos de profesionales, con los que pueden contactar rápidamente online, la prestación de ciertos servicios, lo que les hace reducir su volumen de contratación, ya no necesitan tantos empleados.
