A día de hoy, una de las razones por las que las personas adultas acuden a su médico, es por sufrir un mareo constante. Las razones por las que se puede producir este problema son varias, y es por ello que no podemos tratarnos a nosotros mismos como creamos conveniente.
Eso sí, es muy importante conocer las razones por las que esto nos sucede, al menos así será más fácil explicarle al médico qué sentimos, cuándo y por qué. Tener un poco de orientación tampoco viene nada mal, así que a continuación te dejamos los motivos más habituales por los que sufrimos de mareo.
Otros posibles desencadenantes del mareo
Los anteriormente mencionados son los causantes más habituales del mareo, pero no los únicos. También están los trastornos neurológicos, algunos de estos, como la enfermedad de Parkinson o la esclerosis múltiple pueden producir una pérdida progresiva del equilibrio.
En ocasiones, si nos fijamos en los efectos secundarios de los medicamentos, veremos que el mareo se encuentra entre estos. Algunos pueden ser los anticonvulsivantes, los tranquilizantes, antidepresivos y sedantes. Pero sobre todo, los medicamentos para bajar la presión arterial son los que pueden producir este desvanecimiento si hacen que disminuya demasiado la presión arterial.
El trastorno de ansiedad. Algunos de estos trastornos de ansiedad pueden llegar a causar aturdimiento y sensación de atontamiento. esta clase de trastornos son los ataques de pánico, el temor a salir de casa y estar en espacios grandes y abiertos, denominado como agorafobia.
Si tienes una baja concentración de hierro, es decir, anemia. Esto junto con otros signos y síntomas se pueden manifestar con cansancio, palidez y debilidad. También tenemos la hipoglucemia, una baja concentración de azúcar en sangre. Esta afección se produce en personas que tienen diabetes y usan insulina.
Por último, la hipertermia y deshidratación. Si te encuentras en un clima de mucho calor, o no estás bebiendo los líquidos suficientes, puedes llegar a sentir mareo. Esto se debe a que tu temperatura corporal aumenta más de lo normal, la hipertermia, o te estás deshidratando. Esto puede pasar al tomar ciertos medicamentos para el corazón.
