Six está a un 0,75% del capital de BME para excluirla de la Bolsa española

A Six Group le falta un 0,75% del capital de Bolsas y Mercados Españoles (BME) para poder sacarla de la Bolsa española. A cierre de junio, el operador suizo (que lanzó una OPA sobre la empresa en noviembre) contaba con un 93,164% de la española, pero a lo largo de agosto se ha hecho con otro 1,08% del capital social.

Six, que quiere hacerse con el 100% de la compañía, se comprometió a mantener cotizada a BME hasta alcanzar el 95%. Actualmente cuenta con el 94,249% o lo que es lo mismo, 78,8 millones de acciones. De manera que está a un 0,75% de llegar al 95% que le permitiría ejercitar el derecho de venta forzosa (squeeze out), y en consecuencia, eliminar a la compañía de Bolsa.

De momento, los accionistas tienen hasta el 5 de septiembre para vender al precio de OPA (32,98 euros por acción) y a Six le falta un 5,75% para alcanzar el 100% del gestor bursátil español. Pero si llegada la fecha, no hubieran alcanzado ese 95% “todo sería igual” explican fuentes cercanas a la compañía.

SI NO LLEGA AL 95%

Tal y como se comprometió Six en su folleto de oferta, no ejercitará su derecho de venta forzosa a menos que la proporción de títulos en poder de accionistas no significativos de BME fuera inferior al 5% del capital social de BME una vez finalizado el proceso de compra forzosa.

En ese caso, el porcentaje de acciones que no se vendan seguirían cotizando en la Bolsa española sometidas a los movimientos de mercado. Ya que la suiza no tendría obligación de comprar y la acción dejaría de estar sostenida.

Ante este escenario, los analistas pronostican que con toda probabilidad la acción bajará, pues la empresa se quedaría con un free float muy bajo, donde solo cotizaría un 5,75% del total. Actualmente, la acción está a 32,94 euros, muy cerca del precio de la OPA y el valor apenas se ha movido en lo que va de año, pero pasado el 5 de septiembre el escenario no sería favorable.

“Hay riesgo de caída de la cotización por debajo del precio de la OPA una vez concluya el plazo de venta a SIX. Si no vende ahora, el accionista corre el riesgo de quedarse en un valor de prácticamente nula liquidez a la espera de ver si el grupo suizo opta por aumentarla a futuro”, pero esta decisión podría tardar en tomarse hasta dos años según figura en el folleto y solo si las condiciones del mercado lo permiten (algo incierto en el entorno actual) y si es económicamente viable, explica Natalia Aguirre, analista de Renta 4.

El operador suizo recuerda que los accionistas de BME que deseen vender sus acciones al mismo precio que el de la oferta de adquisición, deberán dirigirse a la entidad participante en Iberclear donde tengan depositadas sus acciones. Para ello cuentan con poco más de una semana.

¿VOLVERÍA BME A LA BOLSA?

En el caso de que Six alcance el 95% y BME dejara de ser una empresa cotizada, también existiría la posibilidad de volver a cotizar, solo que bajo el paraguas SIX-BME. Y podría hacerlo tanto en la Bolsa suiza, como en la española, pero también en ambas. Aunque, actualmente, el grupo suizo tampoco cotiza.

La suiza no ha dado muchos detalles de los planes que tiene para BME, por ello la analista de Renta4 insiste en acudir a la OPA y vender las acciones a 32,98 euros. Tanto por el precio ofertado por SIX, que incluye «una atractiva y generosa prima» respecto a los ratios bursátiles históricamente pagados por BME y la media de sus comparables, como por el riesgo implícito de mantener un valor de mínima liquidez en cartera.

A ello se suma la política de retribución al accionista, uno de los principales puntos fuertes de la tesis de inversión en BME, que será «menos generosa que en el pasado» ante una estrategia más enfocada hacia al crecimiento. Como ejemplo a seguir, el propio pay out histórico de SIX, que oscila en torno al 65% frente a un porcentaje superior al 90% de los beneficios que históricamente ha distribuido BME entre sus accionistas.

Otro de los cambios recientes ha sido en el consejo de administración, los accionistas aprobaron en la junta general extraordinaria la modificación de los estatutos sociales de la compañía, reduciendo el número de miembros del consejo. Así, el mínimo ha pasado de 9 a 6, y el máximo, de 15 a 9.

También esta reorganización pasó por nombrar a Jos Dijsselhof, que es consejero delegado de Six, como presidente de BME. Dijsselhof se queda al frente y Antonio Zoido sale de la nueva estructura tras casi 30 años ligado a la historia de la Bolsa española, donde fue presidente ejecutivo desde que se creó el grupo BME en 2002 hasta abril del año pasado, cuando limitó su papel al de presidente del consejo. Javier Hernani, se mantiene como consejero delegado.