Cinco niñas de Valencia de entre 12 y 13 años han decidido comerse el mundo. No han querido esperar a ser mayores para triunfar, y sin saberlo ya son todo un referente. A su corta edad ya han dado charlas en Silicon Valley y se han codeado con los jefes de Google. De lunes a viernes van al colegio, y en sus ratos libres se dedican a su startup: Stopit.
Érica Garrido, Inés García, Alba Garrido, Marta Cervera y Carla Garrido son las creadoras de Stopit, junto a su mentor, Carlos García. Una empresa tecnológica que lucha por mitigar la violencia machista. Han creado una pulsera que manda señales en caso de agresión. Ahora están buscando financiación para dar un paso más.
Las cinco chicas se presentaron al concurso Technovation Silver Scholarship, impulsado por varias empresas tecnológicas estadounidenses y quedaron segundas. El certamen busca fomentar el empoderamiento de las niñas y animarlas a emprender. Todavía existe un porcentaje muy bajo de mujeres en carreras de ciencias y tecnología, y aún menos en los altos cargos directivos. Compitieron contra otras 10.000 niñas de todo el mundo, y fueron subcampeonas.
En España hicieron lo propio en el concurso “nos duele a todos” que lanzó Mutua Madrileña y quedaron primeras, de los 1200 colegios que participaban. El premio fue una beca de estudios. Sumando premios han conseguido desarrollar el proyecto. Las pulseras entonces se hicieron realidad.
El funcionamiento se basa en varios tipos de señales. Tiene una doble funcionalidad: la activa y la pasiva. La forma activa hace que la app se active sola, sin mediación de la persona que necesita ayuda. En la pasiva es la usuaria la que tiene que activarla pulsando un botón. La app tiene varios botones: help 016, que el número que se proporciona a las mujeres para denunciar o pedir ayuda. Friends and Family, que llama a los contactos predeterminados, y alerta sms que manda un sms a los contactos predeterminados en la app. Además, dispone de un GPS para poder localizar a la víctima.
La iniciativa era crear una app con un bien social, y ellas eligieron la violencia machista porque les pareció un tema muy importante. “Fuimos a Silicon Valley, y allí quedamos segundas. Tuvimos que practicar mucho para hablar delante de toda la gente. La presentación era en inglés, pedimos en el colegio que nos dejaran practicar. Nos costó, pero salió muy bien”, señalan en declaraciones a MERCA2.
CAMPAÑA DE CROWDFUNDING
Pero no contentas con el triunfo, estas cinco chicas quieren seguir creando. “Queremos evolucionarlo y crear un sensor de presión”. Un dispositivo que envíe un aviso si la persona que lo lleva sufre una presión fuerte en las muñecas. Para ello necesitan financiación. La pulsera fue posible por la inversión de los premios que han ganado, y ahora van a abrir una campaña de crowdfunding. Lo van a hacer este jueves, 22 de noviembre, en el Congreso de Violencia de Género Digital, en el que van a participar. La campaña va a estar activa unos 50 días. “Queremos que la gente vea nuestro proyecto, y necesitamos mucho dinero”, aseguran. Todo el que quiera colaborar puede hacerlo a través de su web: www.stopitgirls.com y a través de la plataforma de crowdfunding kickstarted.
Tres de estas cinco chicas han participado este lunes, en la jornada de mujeres emprendedoras organizado por Wayra, la aceleradora de startups de Telefónica. Varias mujeres emprendedoras han contado sus vivencias personales. Historias muy distintas, pero con elementos comunes. El esfuerzo y el sacrificio. Las barreras que derribar. Y el convencimiento absoluto de que pueden hacerlo.