El Banco Mundial avisa del enfriamiento del crecimiento mundial

Los bancos centrales elevan las tasas de endeudamiento y el estímulo fiscal de Estados Unidos comienza a desaparecer, lo que para el Banco Mundial supondrá una desaceleración del crecimiento mundial en el tiempo de dos años.

Está previsto que la economía mundial crezca un 3,1% este mismo año, cayendo a un 3% para el próximo 2019, así lo afirmaba el banco de desarrollo en su informe más reciente, el Global Economic Prospects. Estas previsiones se mantienen sin cambios desde enero, la última vez que el banco con sede en Washington actualizó sus proyecciones. El atisbo de recuperación despertó con el acerelamiento de la mitad de las economías del mundo.

Pero, a medida que la economía mundial se acerque a la plena producción, el comercio y el crecimiento de las inversiones disminuyan, y las condiciones financieras se endurezcan, el crecimiento se ralentizará un más en 2020. Los riesgos comienzan a inclinarse a la baja e incluyen la amenaza de una contracción repentina en el crédito global con un aumento en el proteccionismo.

“Nos preguntamos si la marea, ahora, está cambiando”, dijo Ayhan Kose, director del Grupo de Perspectivas de Desarrollo del Grupo del Banco Mundial. “Esta historia generalizada de mejora que tuvimos ya no existe. Así que estamos esperando una desaceleración”, añadió.

Los inversores están evaluando el sólido desempeño de la economía mundial frente a una serie de riesgos, entre ellos las alzas de tasas de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos, la perspectiva de una guerra comercial entre Estados Unidos y China, y la elección de un Gobierno euroescéptico en Italia.

El principal riesgo para los mercados emergentes y las economías en desarrollo es un endurecimiento inesperado de las condiciones financieras, según ha dicho Kose. A pesar de esto, el banco no ve señales inminentes de una crisis financiera en los mercados emergentes, ni si quiera en los recientes brotes de volatilidad en Argentina y Turquía.

Una guerra comercial mundial afectaría más a los mercados emergentes, según el Banco Mundial. Además, la proyección del impacto aumentaría si cada país aumentara los aranceles a los niveles más altos permitidos por las normas de la Organización Mundial del Comercio.

“El crecimiento mundial en este momento es sólido. Este es un buen momento para encontrar formas de sostener el crecimiento mundial”, dijo Kose. “El comercio siempre ha sido un factor importante en el apoyo a la economía mundial, especialmente en los mercados emergentes y las economías en desarrollo”, añadió.

IMPUESTOS Y GASTOS

El Banco Mundial actualizó su pronóstico de crecimiento para Estados Unidos este año al 2,7%, lo que supone una subida de 0,2 puntos desde enero. Por lo tanto, Estados Unidos crecerá un 2,5% el próximo año. Fueron los aumentos de gastos aprobados por el Congreso en febrero el principal factor de las actualizaciones.

El aumento del gasto, junto con los recortes de impuestos que entraron en vigor a principios de este año, elevará el déficit presupuestario de Estados Unidos al 5% del producto interior bruto en la próxima década, desde el 3,5% de este año, según el Banco Mundial.

Se espera un crecimiento de un 2,1% este año para los países de la zona euro, mientras que para el próximo caerá a un 1,7%, dijo el banco.

El banco de desarrollo recortó su pronóstico de crecimiento este año en Japón llegando al 1%, ya que unos precios más altos del petróleo reducen los ingresos y el endurecimiento fiscal afectando al crecimiento. La economía de Japón crecerá un 0,8% el próximo año.

China crecerá un 6,5% en 2018, hasta un 0,1 punto desde enero, afirma el banco. El crecimiento de China se reducirá a un 6,3% el próximo año y un 6,2% en 2020.

Andrew Mayeda para Bloomberg