Margaret Talev y Nick Wadhams para Bloomberg
El presidente Donald Trump amenazó a Corea del Norte con “la aniquilación” si continúa su hostilidad hacia los Estados Unidos o a sus aliados y exhortó al resto de los líderes del mundo a que aceptaran su postura al enfrentarse al proyecto intimidatorio de Kim Jong Un.
En su debut ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, Trump dejó de lado el convencional llamado al diálogo político o la diplomacia en favor de un dialecto agresivo. Se comprometió a aplastar a “los perdedores terroristas” de Medio Oriente y menospreció al líder del régimen norcoreano Kim Jong Un.
“Estados Unidos tiene mucha fuerza y paciencia, pero si nos vemos obligados a defendernos a nuestros aliados, no tendremos más remedio que destruir totalmente a Corea del Norte”, sentenció Trump. “Rocket man (el hombre cohete) está en una misión suicida para sí mismo y su régimen”.
El fuego retórico de Donald Trump no se quedó en Corea del Norte, sino que se extendió a Irán y Venezuela.
Dijo que las trampas de la democracia en la república islámica enmascaran una “dictadura corrupta” que apoya el terrorismo. El acuerdo internacional diseñado para frenar el programa nuclear de Irán es “una vergüenza para los Estados Unidos”, que debería revisarse. Mientras aplaudía a otros líderes por presionar el régimen en Venezuela, Trump señaló que los Estados Unidos están “preparados para tomar nuevas medidas” para detener la imposición del régimen totalitario allí.
Donald Trump aprovechó para promocionar su programa América Primero ante las Naciones Unidas
Soberanía nacional
El discurso de Trump, que se extendió por 42 minutos, representó un desafío para las Naciones Unidas, fundada hace casi 72 años para “salvar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra” y “reafirmar la fe en los derechos humanos fundamentales”. Las ideas de su campaña política “América Primero” darán forma al compromiso norteamericano en el mundo. En opinión de Trump, la soberanía de las naciones es primordial y organizaciones como la ONU son “el mejor vehículo para elevar la condición humana”.
“Como Presidente de los Estados Unidos, siempre pondré a Norteamérica primero”, sostuvo Trump, “igual que ustedes, como líderes de sus países, siempre pondrán a sus países en primer lugar”.
El enfoque puede apelar a la base política de Trump en los Estados Unidos, pero la respuesta de la ONU mezcla algo de sorpresa y decepción. La reacción más entusiasta llegó del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, quien se alineó cerca de Trump.
“En más de 30 años de experiencia con la ONU, nunca escuché un discurso tan audaz o tan valiente”, indicó Netanyahu, quien criticó duramente el acuerdo con Irán, según una publicación posterior en Twitter.
Trump criticó que China siga comerciando con Corea del Norte tras las recientes sanciones
Acuerdo de Irán
El presidente francés Emmanuel Macron, quien ha forjado una estrecha relación con Trump, contradijo al mandatario norteamericano sin mencionarlo en su discurso ante la Asamblea General. En declaraciones modificadas a último momento tras escuchar a Trump, Macron expresó que es “falso” pensar que las naciones son más fuertes al actuar solas. Consideró “robusto” el acuerdo nuclear de Irán y dijo que “ponerlo en duda sin proponer cómo reemplazarlo es un error”.
Corea del Norte ha sido el tema más urgente en la ONU desde la prueba del 3 de septiembre del régimen de Kim de lo que afirmó fue una bomba de hidrógeno y el lanzamiento de dos misiles sobre Japón en el último mes. Trump agradeció a Rusia y China por su apoyo a la última ronda de sanciones contra Corea del Norte, pero indirectamente criticó al gobierno de Xi Jinping por seguir comerciando con la aislada nación. También citó “amenazas a la soberanía, desde Ucrania hasta el Mar de China Meridional”, referencia inequívoca a las acciones de Rusia.
Trump condenó después a Irán y lo calificó como “un estado vengativo económicamente agotado cuyas principales exportaciones son la violencia, el derramamiento de sangre y el casos”. El mandatario reiteró sus quejas sobre el acuerdo nuclear de Irán, calificandolo de “una de las peores transacciones en las que Estados Unidos entró jamás”.
“Francamente, ese trato es una vergüenza para los Estados Unidos, y no creo que hayamos escuchado lo último que tiene por decir”. Trump se enfrenta a una fecha límite del 15 de octubre para informar al Congreso si los Estados Unidos continuará certificando el cumplimiento de Irán con el acuerdo internacional, un requisito que se da cada 90 día.
Desde Irán calificaron de “insensatas” las declaraciones del presidente Donald Trump
Delegaciones diplomáticas
La delegación de Corea del Norte, que estaba sentada directamente frente al podio, salió al vestíbulo antes de que Trump iniciara su discurso. Javad Zarif, ministro de Relaciones de Exteriores de Irán, calificó de “insensatas” las declaraciones de Trump, tanto “que no merecen una respuesta”.
Carl Anne Robbins, colaboradora adjunta del Consejo de Relaciones Exteriores, aseguró que no estaba claro que Trump asentó una nueva doctrina para guiar la política exterior estadounidense.
“Realmente el impacto de esto fue poner a Pyongyang en marcha y no ofrecer una gran cantidad de garantías a los aliados y ciertamente así no hay forma de avanzar”, dijo Robbins mediante conversación telefónica.
Aunque subrayó la primacía de la soberanía nacional -al mencionarlo 21 veces- Trump dijo que espera que las disputas se resuelvan siempre a través de la ONU.
“Gran parte del mundo está en conflicto, y algunos, de hecho, se van al infierno”, advirtió Trump. “Pero la gente poderosa en esta sala, bajo la dirección y auspicio de las Naciones Unidas, puede resolver muchos de estos problemas complejos”.
De todos modos, también criticó a la institución, diciendo que se había ocupado a menudo de la “burocracia y el proceso” y quejándose de que los Estados Unidos ha heredado una injusta parte de su costo.
Trump consideró el discurso como un momento de enorme oportunidad para reunir al mundo para controlar a Corea del Norte e Irán, según sus ayudantes.
Xi Jinping, presidente de China, estuvo ausente mientras se prepara el congreso del Partido Comunista el mes próximo
Tras finalizar, dijo a los reporteros: “creo que salió muy bien. Dije lo que tenía que decir”, según Fox News.
Una aliada clave de los Estados Unidos que perdió el discurso fue la Primera Ministra británica, Theresa May, quien visitó la Casa Blanca tras su toma de posesión, estuvo fuera de la sala de la ONU en una mesa redonda para empresas que invierten en el Reino Unido.
Varios líderes del mundo omitieron la reunión de la ONU por completo. La canciller alemana, Angela Merkel, se quedó en casa mientras lucha por la reelección este domingo. El presidente Xi Jinping está en China preparándose para el crucial congreso del Partido Comunista el próximo mes. Enrique Peña Nieto, de México, quien estuvo en desacuerdo con Trump en materia de comercio y seguridad fronteriza, también se ausentó.