Los accionistas de Liberbank no descartan un tercer jugador en la fusión con Unicaja

La fusión de Liberbank y Unicaja se anunció solo un mes después de la de Bankia y CaixaBank, sin embargo, esta última va mucho más avanzada. Esta misma semana, las dos entidades han celebrado sus juntas de accionistas y han dado luz verde a la operación. También estas dos entidades han ido dando información de cada paso que daban.

Pero Liberbank y Unicaja se muestran mucho más opacas, quizás, porque ya lo intentaron una vez y no salió bien. De esta manera, evitarían que los rumores de mercado, para bien o para mal, afecte a su cotización o perjudique las negociaciones.

Pese a ello, los accionistas creen que hay algo más. De hecho, no descartan que una vez que los dos bancos se den el “sí, quiero”, algo que se espera que ocurra en febrero de 2021, aparezca un nuevo jugador.

TERCER JUGADOR

Liberbank ya estuvo en conversaciones con Unicaja e Ibercaja (incluso recibió oferta de Abanca) para fusionarse en 2019, aunque ninguna llegó a buen puerto. Las cosas han cambiado mucho en un año, principalmente porque el Banco Central Europeo (BCE) lleva insistiendo todo 2020 en que los bancos de la zona euro tienen que impulsar su rentabilidad reduciendo costes.

El nivel óptimo está por encima del 10%, pero Liberbank (que ni si quiera muestran el ROE en sus resultados) superan ligeramente el 1%. Por eso siempre ha estado en todas las quinielas. A la presión del regulador, se suma el reparto de sillas. Fuentes cercanas a la operación indican que lo que frustró el primer intento de fusión de Liberbank y Unicaja -además de la ecuación de canje- fue “la lucha de sillones”.

En concreto, porque Manuel Menéndez, consejero delegado de la entidad desde 2011, no quería perder este cargo en la entidad resultante. Sin embargo, esto ya estaría solucionado este año. Menédez permanece como CEO y Manuel Azuaga, presidente de Unicaja, mantendrá su actual puesto en el nuevo banco.

Con las hechas y después de llevar a cabo los ajustes necesarios en personal y oficina, para reducir gastos, aparecería en juego una tercera entidad. Los analistas de Caixabank ya apuntaron a que podría ser Ibercaja, pero desde la ruptura de BBVA con Sabadell, los expertos ahora creen que el banco que preside Carlos Torres podría entrar en este juego.

Sea como sea, nadie cree que el baile de fusiones haya acabado. La crisis del coronavirus ha sido la puntilla, pero el sector ya estaba muy perjudicado por los tipos de interés y la fuerte competencia. Además, ahora el mapa bancario ha cambiado, el tamaño del nuevo CaixaBank, Santander y BBVA por separado, hacen muy pequeñas al resto de entidades, por eso las previsiones apuntan a que al menos uno de estos grandes se lance a por alguno de los pequeños. No a por cualquiera, sino a por aquellos que aporten sinergias.

LIBERBANK Y UNICAJA EN BOLSA

Las acciones de Liberbank y Unicaja reaccionaron al alza tras el anuncio de fusión de Bankia y CaixaBank el pasado 3 de septiembre. Tanto el asturiano como el malagueño, sumaron más de un 10%. Los inversores descontaban que ellos tenían papeletas para ser los siguientes, y así fue.

Desde entonces, Liberbank ha seguido recuperando terreno y ha sumado otro 26%, de esa manera consigue reducir las pérdidas anuales al 20% y alejarse de los mínimos históricos que tocó el 20 de marzo (0,116 euros), actualmente su cotización supera los 0,27 euros.

Unicaja también deja atrás los 0,44 euros de abril y supera los 0,67 euros. La entidad logra reducir sus caídas anuales al 30% después de revalorizarse un 13% en los últimos tres meses.

Si estos bancos terminan por convocar las juntas para aprobar la fusión, sus acciones volverán a calentarse en la Bolsa española. Más si cabe, si se lanza una nueva oferta por los dos. Entre tanto, los analistas de Citigroup ya han descontado que sus títulos van a seguir subiendo y le ha subido el precio objetivo. A Liberbank, hasta  los 0,35 euros por acción y a Unicaja, hasta los 1,05 euros.