Las compañías canadienses de cannabis han recibido una avalancha de inversiones que hasta ha puesto paranoicos a algunos. «Se podría afirmar que nuestras valoraciones están un poco por delante de nosotros», dijo Paul Rosen, máximo ejecutivo de Tidal Royalty que financia compañías de cannabis.
Tilray, una compañía de marihuana tasada en casi 9.000 millones de dólares, actualmente cotiza a una relación precio-ventas de aproximadamente 124. La cifra es más de 25 veces mayor que la de Amazon y Apple, las dos compañías más valiosas. Y el valor de mercado de más de 11.000 millones de dolares de Canopy Growth está a la par del de Barrick Gold, aunque se espera que este año la minera, con 18.000 trabajadores, registre 20 veces más ventas que la compañía de cannabis, que tiene 1.000 empleados.
«Todavía no es un sector maduro según los estándares de muchos gestores de carteras», afirma Bruce Campbell, fundador de StoneCastle Investment Management, que abrirá un fondo común de inversión centrado en el cannabis. «Las tasaciones son astronómicas según cualquier tipo de métrica típica, por lo que asustan a muchas instituciones».
Mientras Canadá se prepara para legalizar la marihuana el 17 de octubre, la industria del cannabis ha pasado de no ser prácticamente nada hace cinco años a una con alcance global en la actualidad. Empresas canadienses como Canopy, Tilray, Aurora Cannabis y Aphria lideran el camino. Se espera que el gasto mundial de los consumidores en cannabis llegue a los 32.000 millones de dólares para el año 2022, según las empresas estadounidenses Arcview Market Research y BDS Analytics.
ANTIPATÍA
Actualmente, el uso recreativo es legal en nueve estados de Estados Unidos y el distrito de Columbia. Además, varios países, desde el Reino Unido hasta México, están en proceso de aprobar el uso de marihuana medicinal. Pero una gran cantidad de inversiones de cannabis depende de la marcha constante hacia la legalización en EE.UU, que es difícil de apresurar dado el estancamiento en el Congreso y la antipatía por el tema del fiscal general, Jeff Sessions. La marihuana todavía es ilegal a nivel federal en EE.UU.
El último frenesí de inversión comenzó en serio el mes pasado cuando Constellation Brands Inc., fabricante de la cerveza Corona, anunció una participación de 3.800 millones de dólares en Canopy. Desde entonces, el índice BI Canada Cannabis Competitive Peers ha avanzado 45%. La mayoría de las grandes empresas cotizadas y los inversionistas institucionales evitaban la industria de la marihuana, temerosos de enfrentarse a la ley estadounidense. La inversión de Constellation fue vista como una validación.
El potencial de crecimiento de la marihuana todavía tiene que traducirse en grandes ventas o ganancias. Tilray reportó ingresos por 9,7 millones de dólares en el segundo trimestre. Aurora, tasada en aproximadamente 6.400 millones de dólares, registró ventas por 12,2 millones de dólares en su trimestre más reciente. En solo los primeros dos días de esta semana, las acciones de Aurora han subido 12% y las de Tilray avanzaron 23%. Se espera que el mercado crezca después de la legalización, pero aún podría no ser suficiente para justificar las tasaciones.
Una vez que la industria alcance su madurez, es probable que las acciones operen en múltiplos entre los de una compañía de productos de consumo y una farmacéutica, o sea, entre 12 veces y 20 veces el Ebitda futuro, dijo Matt Bottomley, analista de Canaccord Genuity Group Inc.
Kristine Owram y Craig Giammona, para Bloomberg
