Anabel Pantoja ha regresado a Canarias con una confesión que no ha pasado desapercibida y que ha querido compartir con sus seguidores tras unos días que, según admite, se le han hecho cuesta arriba. Después del luminoso puente de la Constitución que disfrutó junto a David Rodríguez y la pequeña Alma en Ámsterdam, el aterrizaje emocional y físico en Gran Canaria no ha sido tan amable como esperaba. La influencer vive un momento dulce, tanto en lo profesional como en lo personal, pero aun así reconoce que esta semana se le ha complicado más de lo habitual y que está afrontando una realidad menos glamurosa de la que suele mostrar en redes.
1Anabel Pantoja regresa a Canarias
Su vuelta a la isla se ha producido tras varias semanas en Madrid, donde ha permanecido debido a su participación en ‘Bailando con las estrellas’, un proyecto televisivo que le ha devuelto al foco mediático y le ha exigido un ritmo intenso de entrenamientos y grabaciones. Sin embargo, al llegar a casa se ha encontrado con un escenario muy distinto al de los sets de televisión: una combinación de mal tiempo, cansancio acumulado y la marcha de David, que ya ha regresado a Córdoba para retomar su actividad como fisioterapeuta. Desde hace años, su relación funciona a base de viajes constantes, despedidas y reencuentros, un equilibrio afectivo que manejan con naturalidad pero que no siempre es sencillo.
“Tengo que enseñaros mi realidad”, así tituló Anabel el vídeo que publicó en Instagram ante sus más de dos millones de seguidores. En él, la sobrina de Isabel Pantoja aparece con un moño improvisado, rostro cansado y en pijama, con la pequeña Alma dormida entre sus brazos. Desde esa imagen íntima, relató que nada más llegar a casa se encontró con la borrasca Emilia descargando con fuerza sobre Canarias. “Volví a casa y tormenta, tsunami, borrasca Emilia”, contaba entre resignación y humor, señalando que aunque no vivió los peores efectos en el sur de la isla, el temporal fue lo suficientemente fuerte como para complicar aún más su reencuentro con la rutina.
Junto al mal tiempo, la influencer ha tenido que lidiar también con un contratiempo de salud, del que no ha dejado claro si se trata de ella, de su hija o de ambas, pero sí ha querido tranquilizar a quienes la siguen asegurando que no es nada grave. “Tenemos un poquito de fiebre desde ayer a hoy”, explicaba, aludiendo a lo habitual que resulta en estas fechas la aparición de virus estacionales, sobre todo en hogares con niños pequeños. Aun así, el malestar le ha impedido dedicarse a ciertas rutinas básicas. “Estoy frita por lavarme la cabeza, secarme el pelo, echarme mi ‘skin care’, pero es imposible con este koalita que tengo encima”, añadía mientras sostenía a Alma, dejando ver la parte más humana y vulnerable de su maternidad.








