Blanquea tus dientes con esta técnica desde tu hogar y sin perder un montón de pasta en médicos

No es una condición de salud severa, pero tener los dientes amarillentos sí afecta la apariencia y la interacción social, ya que nuestra sonrisa es uno de los primeros aspectos que los demás perciben de nosotros. Además, habla mucho de nuestro estado de ánimo: se refleja nuestro estado de salud y bienestar.

Afortunadamente, existen soluciones económicas y caseras que te pueden ayudar a mejorar la comodidad y la confianza en nuestra dentadura. Ya no hace falta que gastes un montón de pasta en tratamientos odontológicos y que, incluso, algunos son nocivos para el esmalte de tus dientes. En este artículo te traigo una receta que te dará excelentes resultados.

Tener tus dientes blancos ya no es una misión imposible

Este brebaje casero para tener unos dientes más blancos es ideal si no quieres pasar por ningún tratamiento invasivo, y además quieres ahorrar dinero. Lo único que necesitas es enjuague bucal, tu pasta de dientes preferida y un poco de bicarbonato de sodio. Con estos tres elementos harás una pasta casera increíble para alcanzar una blancura de otro mundo.

Cuando tengas una mezcla lo más homogénea posible, vas a utilizar la preparación 3 veces al día (cada vez que te cepilles la dentadura), durante quince días. Cepíllate como lo haces usualmente con tu nueva receta, pero mantén la pasta en tu boca durante al menos 5 minutos, para que logre hacerte efecto.

¿Por qué mi sonrisa es amarilla?

¿Por qué mis dientes son amarillos?

Con el transcurso del tiempo, los dientes tienden a adquirir una tonalidad amarillenta. Esto se debe a que debajo del esmalte dental existe una capa de dentina, de color marrón pálido, que puede volverse más visible a medida que el esmalte se desgasta, especialmente en personas mayores. Aunque este proceso es natural e inevitable, diversos factores pueden acelerarlo, como por ejemplo:

  • Consumo frecuente de café, té, vino tinto y bebidas carbonatadas, que pueden manchar o amarillear los dientes.
  • Tabaquismo.
  • Dieta rica en alimentos procesados, los cuales suelen ser altamente ácidos.
  • Condiciones médicas que causan sequedad bucal debido a la disminución de la producción de saliva.
  • Uso de ciertos antibióticos.
  • Influencia de factores genéticos.

Algunos de estos factores son inevitables, mientras que otros están relacionados con tus hábitos y pueden ser disminuidos mediante una adecuada higiene bucal y la reducción del consumo de sustancias perjudiciales. Por eso, siempre puedes incluir esta receta máquina que en solo quince días de tratamiento le devolverá a tu sonrisa una luz inigualable.

Camila Miranda De Marzi
Camila Miranda De Marzi
(Buenos Aires, 1998) Licenciada en Artes de la Escritura y estudiante de Periodismo Narrativo. Escribe actualidad en Agenda Feminista, revista de la que es parte desde hace varios años. Adora leer y escribir, aunque lee más de lo que escribe.