Algunos viajes internacionales pueden suponer un riesgo para la salud del viajero, en función tanto las características del individuo (edad, sexo, condiciones médicas previas…) como de la situación epidemiológica concreta del destino a visitar, con enfermedades trasmisibles no presentes en nuestro medio que, en muchos casos, pueden prevenirse. Conocer cuáles son las enfermedades o problemas de salud que pueden producirse, y las formas en las que pueden generarse y transmitirse, y recibir vacunación o inmunoprofilaxis en los casos en que esté disponible, son la mejor herramienta para evitarlas, antes, durante y después del viaje
Por este motivo, el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz acaba de poner en marcha su Servicio de Atención Integral al Viajero Internacional (SAIVI), diseñado para ofrecer información, asesoramiento, inmunoprotección y cuidado integral y especializado de la salud antes del viaje y durante el mismo, así como dar una respuesta al regreso, en caso de ser necesaria, ya que cuenta con un equipo de profesionales de referencia y con todos los medios necesarios.
«Cualquier persona que vaya a realizar un viaje a un país en el que existen riesgos para su salud puede, y debe, consultar antes de irse con nuestro SAIVI, formado por un equipo médico de expertos en salud del viajero que realizará una consulta individualizada y dirigida», explica la Dra. Maria Dolores Martín Ríos, jefa del Servicio de Medicina Preventiva del hospital que, junto al Dr. Miguel de Górgolas Hernández Mora, su homólogo en la Unidad de Enfermedades Infecciosas, dirige también este nuevo servicio.
Y es que, aunque la mayor parte de las vacunas y profilaxis no son «obligatorias» para viajar a través del mundo, en muchos casos pueden ser necesarias para preservar la salud del viajero. Por eso, «antes de viajar, recomendamos realizar una visita clínica para recibir orientación personalizada y facilitar el cuidado de su salud durante el desplazamiento», añade por su parte la Dra. Helena Moza Moríñigo, responsable del servicio.
Consulta médica preventiva y asesoramiento antes del viaje
Antes de iniciar el viaje, el SAIVI realiza una consulta en la que recoge datos sanitarios y condiciones personales del viajero (edad, enfermedades previas, alergias, deseo de embarazo, etc) y datos del desplazamiento (ruta, estancias y tipo de alojamiento, tiempo, lugar del viaje, actividades en destino…) para evaluar los riesgos individuales para la salud antes, durante y después del viaje. También tiene en cuenta la distribución endémica de las enfermedades, así como alertas epidémicas específicas para dar una correcta atención al viajero.
Teniendo en cuenta estos datos, ofrece tanto información personalizada sobre riesgos sanitarios en función del destino, época del año, tipo de viaje, duración del mismo, forma de alojamiento y patologías previas, historial clínico del viajero y antecedentes de viajes, como recomendaciones sanitarias y preventivas, que en ocasiones incluyen la vacunación o la inmunoprofilaxis, específicas para cada caso. En este caso, según el perfil y antecedentes del viajero y el destino del viaje, en la consulta se elaborará un calendario de vacunación individualizado para la administración de las vacunas necesarias, así como pautas de profilaxis y tratamiento.
Las recomendaciones basadas en una evaluación individual de los riesgos concretos incluyen medidas preventivas generales e información particular sobre enfermedades transmitidas por artrópodos; evaluación del riesgo de propagación, prevención y autotratamiento frente a enfermedades transmisibles por vía digestiva, piel y mucosas; elaboración del botiquín básico y específico; administración de las vacunas necesarias en la propia consulta (excepto fiebre amarilla); sensibilización sobre posibles problemas tras el viaje; y problemas relacionados con factores físicos (jet-lag, mal de altura…). Por supuesto, apunta la Dra. Martín, «también se valora el riesgo y la indicación profilaxis de malaria en caso de ser necesaria, ajustada, por supuesto, a las características del viajero; y otras medidas sanitarias que el viajero pueda necesitar».
Junto a esta información -continúa la jefa del SAIVI-, el servicio asesora sobre otras materias de interés como la ropa, calzado y complementos recomendables, las picaduras de mosquito, los animales venenosos, las aguas y baños, los accidentes de tráfico, las relaciones sexuales, el agotamiento, el calor, la exposición solar y los golpes de calor, el buceo, y el seguro médico de viaje.
Consulta telemática durante del viaje
Más de la mitad de los viajeros sufre algún síntoma leve durante su desplazamiento», asegura la Dr. Moza, quien añade: «Nuestro objetivo es acompañarle durante el viaje, ofreciendo no solo información sanitaria de los destinos que va a visitar, sino la posibilidad de contactar con un médico especializado en salud internacional cuando lo necesiten y de pedir asesoramiento a través de un e-mail si tiene problemas de salud durante el viaje, para que se sienta más seguro y tranquilo durante el mismo.
Consulta médica al regreso del viaje
Finalmente, y pese a todas las precauciones, asesoramiento y cuidados, «es frecuente que los viajeros internacionales desarrollen algún síntoma durante el viaje y necesiten de una consulta médica a su regreso», admite la responsable del servicio. Por eso, recuerda a cualquier persona que sufra algún problema de salud o enferme durante el viaje, y cuyos síntomas se mantengan tras el retorno, que el equipo del SAIVI tiene «formación específica y amplia experiencia en enfermedades tropicales e importadas para llevar a cabo un proceso diagnóstico y de tratamiento para enfermedades del viajero y tropicales». Además, los profesionales médicos de este servicio son expertos en prevención e inmunización, y reciben información actualizada de las alertas epidemiológicas y formación continuada en su prevención y tratamiento.
Los responsables del Servicio de Atención Integral al Viajero Internacional de la Fundación Jiménez Díaz recomiendan acudir a la consulta al menos cuatro a ocho semanas antes del viaje, y matizan que, si no es posible hacerlo con esta antelación, independientemente del margen con el que se cuente, es aconsejable realizar una consulta previa al desplazamiento. «Todas las personas, incluidos los ‘viajeros de última hora’, que vayan a visitar un destino en el que existen riesgos para la salud deben solicitar esta atención», concluyen.