La Moncloa estudia repetir el decreto-ley de 2018 para desencallar RTVE tras el cese de Elena Sánchez

La hasta hace unas horas presidenta interina Elena Sánchez promovió ayer el cese del director de Contenidos generales de RTVE, José Pablo López, y éste se relamió al conocer unos minutos después que la propia Sánchez era destituida.

Ayer acabó con sangre la batalla campal que ambos directivos protagonizaban de manera ya indisimulada desde que Elena Sánchez realizó una serie de maniobras para evitar el fichaje de David Broncano, que tanto ilusionaba a José Pablo López.

El escenario que arroja el final de la guerra es cruento para el Gobierno: 2 consejeros designados por ellos y 3 del PP, que forman mayoría en un Consejo con 10 miembros, han apostado por conformar una presidencia rotatoria que también es apoyada por 1 de los consejeros designados por Unidas Podemos y el único del PNV.

Pilar Alegría, portavoz del Gobierno, mostró sus recelos tras el Consejo de Ministros: «Estamos conociendo con preocupación las informaciones y las filtraciones de lo sucedido en el Consejo de Administración, pero no podremos analizar lo sucedido hasta que termine el Consejo. Lo fundamental es preservar la independencia de RTVE como servicio público de calidad que es».

Lo cierto es que Pedro Sánchez prometió independencia en RTVE, llegando a asegurar en la presentación de la moción de censura contra Mariano Rajoy equivalía a «corrupción», y en los últimos 6 años no ha hecho otra cosa que intentar controlar la Corporación pública de la mano de la administradora única Rosa María Mateo, Fran Llorente, Enric Hernández o el propio José Pablo López.

RTVE
José Pablo López.

El fallecido Miguel Barroso y José Miguel Contreras llevan 6 años radiografiando la situación de RTVE, no tanto a nivel informativo, ya que los reputados ‘Telediarios’ han dejado de ser un campo de batalla político, como en el de la política de compras, epígrafe en el que están saliendo favorecidas las productoras del Grupo Prisa y sus satélites.

Las empresas beneficiadas son LaCoproductora, propiedad de la editora de la SER y El País; The Pool, del consejero del multimedia Andrés Varela Entrecanales; o Bambú, perteneciente a Vivendi, que es el segundo accionista de la compañía fundada por Jesús de Polanco.

El bloqueo del Consejo de Administración (que posibilita que el PP ejecute mayorías frente a los deseos del Gobierno) y el del Congreso (que impide la presentación de presupuestos o la renovación de 6 consejeros de RTVE, los 3 del PP, 2 del PSOE y 1 de Unidas Podemos) podrían llevar a La Moncloa a intentar retener el control de la Corporación pública ‘por las bravas’.

Pedro Sánchez ejecutó un decreto-ley en 2018 para elegir como administradora única de RTVE a Rosa María Mateo después del ‘no’ del Congreso a su intentona de nombrar como presidente a Tomás Fernando Flores, que no era del agrado de Unidas Podemos.

Y el presidente del Gobierno podría volver a utilizar esta herramienta que conllevaría que el PP hable de ‘golpe de Estado’ pese a que los ‘populares’ mantienen figuras poco edificantes como la presidencia interina en Telemadrid del polémico José Antonio Sánchez, comisario político de Génova 13 desde hace décadas.

Cabe recordar que el Tribunal Constitucional ‘anuló’ en 2021 el nombramiento de Mateo por marginar de la decisión al Senado, hoy controlado por mayoría absolutísima por el Partido Popular.