Ibercaja ha completado este martes con éxito la emisión de su primer bono verde con el objetivo de financiar viviendas y edificios sostenibles, así como proyectos que impulsen las energías renovables, entre otros, por un importe de 500 millones de euros.
Esta emisión de deuda sénior preferred se realiza en el Marco de Bonos Verdes que Ibercaja publicó la semana pasada y a través del que se financiarán proyectos de cinco categorías distintas en base a su contribución a los objetivos medioambientales de la Unión Europea y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas.
La fuerte demanda total recibida por más de 200 inversores ha alcanzado un volumen superior a 3.800 millones de euros, lo que supone más de siete veces el importe de la emisión. Entre la base inversora destaca el peso de un importante número de inversores con carácter sostenible.
El vigor de la demanda ha permitido a Ibercaja Banco estrechar el rango de precios de esta emisión que únicamente puede adquirirse por parte de inversores institucionales, hasta situar la rentabilidad en el 4,426%.
«Esta emisión ratifica, de nuevo, la confianza de los inversores institucionales en el proyecto Ibercaja y en su estrategia de sostenibilidad que acredita su capacidad de acceso a los mercados de capitales», ha sostenido la entidad bancaria.
Además, la operación permite a Ibercaja cumplir ampliamente con los requerimientos MREL. Partiendo de los datos reportados a cierre de septiembre de 2023, el ratio MREL de Ibercaja se mantiene en el 23,6%. Este nivel supera en 200 puntos básicos el requerimiento de capital MREL del 21,6%, exigido desde el 1 de enero de 2024.
La demanda recibida ha procedido de más de 200 inversores cualificados (fondos de inversión, aseguradoras y fondos de pensiones, entre otros perfiles). Más del 80% de esta demanda ha correspondido a entidades internacionales de distintas procedencias geográficas.
La fecha de vencimiento de este instrumento de deuda senior preferred se ha fijado para el mes de julio de 2028, pudiendo abrirse una ventana de amortización anticipada en julio de 2027. Es decir, su plazo máximo es de 4,5 años.
Los bancos colocadores de la emisión han sido J. P. Morgan, Morgan Stanley, Natixis, BBVA y UBS.