Durante los días fríos como los que hace últimamente, tu coche puede experimentar diversos problemas debido a las bajas temperaturas. La batería es especialmente vulnerable, ya que el frío reduce su capacidad de rendimiento, dificultando el arranque del motor. Además, los líquidos del motor, como el aceite y el refrigerante, tienden a espesarse, lo que puede afectar su capacidad de lubricación y refrigeración. Las llantas también pueden perder presión con el frío, lo que afecta el manejo y el rendimiento del combustible. El sistema de escape podría sufrir corrosión debido a la sal utilizada en las carreteras heladas. Y si el parabrisas se llena de hielo, tendrás que tener cuidado a la hora de quitarlo para no rayarlo: a lo largo de este artículo te explicamos cómo.
8Lo mejor que puedes hacer es arrancar el coche: el calor acabará deshaciendo el hielo

Arrancar el coche y permitir que se caliente es, de hecho, una estrategia efectiva para eliminar el hielo del parabrisas. El sistema de calefacción interno ayuda a aumentar la temperatura dentro del vehículo, lo que gradualmente contribuirá a deshacer la capa de hielo en el parabrisas. Esta opción es menos agresiva que rascar y evita el riesgo de dañar el vidrio. Combinar este método con el uso de líquidos descongelantes específicos puede acelerar el proceso y facilitar la eliminación del hielo.