Esta semana la sequía ha vuelto a ser protagonista en los medios de información tras la petición de varios municipios catalanes del estado de emergencia por este motivo. Y es que concretamente el Govern ha decretado el estado de emergencia en 24 municipios catalanes localizados en el área del acuífero del Fluvià Muga (22), en el Alt Empordà, y en el embalse de Riudecanyes (2), en el Baix Camp. Esta es una situación más, muy extrema, de la que el campo y por ende la ganadería española está viviendo este año 2023.
En este sentido, cabe recordar la escasez de lluvias que ha habido este pasado invierno y que venía arrastrado de la última parte del otoño. A esto se sumó las lluvias torrenciales y el pedrisco que atacó gran parte de la península ibérica, especialmente al principio de la cosecha de herbáceos, que acabó de finiquitar la pobre cosecha que se esperaba y llegar a la situación actual. Cabe recordar que la situación de estos municipios catalanes es novedosa en España puesto que son los primeros municipios que llegan al escenario de emergencia, el más grave recogido en el Plan especial de sequía (2020).
Agroseguro ya ha pagado 300 millones en indemnizaciones
Ante esta situación, Agroseguro esta pagando, semana a semana, las indemnizaciones por los daños ocasionados sobre cultivos herbáceos, con un pago de 44,9 millones de euros. En total ya se han abonado 299,6 millones. Número importantes en los que hay que señalar los 772,62 millones de euros que se han pagado al cierre de los seis primeros meses del año.
Cifra que ya supera los 769 millones abonados durante el primer semestre de 2022, que es el ejercicio con mayor siniestralidad del seguro agrario. Un escenario bastante malo pues hay que tener en cuenta que faltan todos los siniestros agrícolas y pecuarios del segundo trimestre, que también pinta mal según varios expertos del mundo agrícolas.
Como era de prever Castilla y León, una de las principales zonas productoras de herbáceos de nuestro país, es la región que más indemnizaciones recibe, con 29,9 millones. Destacan los primeros pagos realizados en las provincias de Burgos (con más de 9 millones) y Soria (con 7,3), debido a que son zonas de producción más tardía. Hasta la fecha, en Castilla y León se han abonado 80,8 millones.
A continuación, en esta lista negativa se encuentra Castilla-La Mancha recibe 4,5 millones, de los que 2,4 corresponden a la provincia de Guadalajara y 1,1 a Cuenca. En total, esta comunidad ya ha recibido 60,4 millones. En Aragón, Agroseguro abona 4,2 millones, alcanzando con ello un total de 30,7 en esta región. En el caso de Navarra, se pagan 1,3 millones, lo que eleva el total abonado a 9,8.
También se continúa avanzando en el pago de indemnizaciones en otras zonas de producción, como Andalucía (un millón abonado esta semana y más de 48 en total, es decir, cerca del 85% del total estimado) o Cataluña (que, con 50,6 millones ya recibidos, supera el 95% de la estimación). Además, los productores de La Rioja y Álava (dos zonas de producción tardía, cuyos primeros pagos se realizaron la semana pasada) reciben este viernes más de un millón cada una y alcanzan los 3,3 y 2,5 millones, respectivamente. Agroseguro sigue abonando indemnizaciones por siniestros ocurridos sobre otras producciones
Por último, Agroseguro sigue indemnizando por los daños que la adversa meteorología ha provocado en otras producciones. Así, el pago total realizado este viernes, que alcanza los 52,7 millones de euros, incluye también 2,3 millones correspondientes a daños en ajo, uno de los cultivos más dañados por las heladas y el pedrisco, y otros 2,3 por daños en hortalizas, entre otros pagos.
La agricultura, un sector a la deriva y en profunda desaceleración
Con los datos anteriores y con los de los últimos 25 años a nadie se le escapa la grave situación que atraviesa la agricultura , que se refleja en los datos de julio, mes en el que el sector agrícola registró
el nivel más bajo del empleo en los últimos 23 años, retrocediendo a la afiliación registrada del año 2000. La problemática de la sequía impacta en el sector, pero no es el único factor que explica la pérdida constante de afiliación de los últimos 24 meses.
A esa situación desde CEPYME también suman el alto incremento de costes que ha sufrido el sector en los últimos años, debido a la crisis inflacionaria, pero principalmente al fuerte incremento del SMI y de las cotizaciones sociales, que cabe recordar que se han elevado en más del 65% en los últimos ejercicios. Unas subidas desproporcionadas, que tienen efectos perversos en el mantenimiento y creación de empleo en algunos sectores como el agrícola, ya dañados por otros factores.
