El fallecimiento de José Antonio Reyes, cuando tenía tan solo 35 años, dejó un vacío en la afición sevillista que será imposible de llenar. Los homenajes se siguen sucediendo, pero su recuerdo queda ahora empañado ya que la mala suerte parece perseguir al Sevilla.
Hemos sabido que el futbolista dejó como herencia un montón de deudas, y su familia se ha visto superada para poder hacerles frente. El caso ha pasado a manos de la justicia, cuya medida principal ha sido sacar a subasta las propiedades de José Antonio, entre ellas la casa donde aún viven su viuda y dos hijas que ahora se ven con un pie en la calle. Una historia dramática que te desvelamos a continuación.
4HERENCIA ENVENENADA

En la herencia de José Antonio Reyes figuran 18 inmuebles, pero ninguna tenía la propiedad en firme, lo que significa que todas estaban hipotecados. La deuda total suma una cantidad exorbitada, y la familia del sevillano se ha visto incapaz de asumir los pagos. Ante una deuda que no deja de crecer, la justicia ha tomado cartas en el asunto y ha sacado a subasta las propiedades del futbolista fallecido.