miércoles, 11 diciembre 2024

Vía libre a Iberdrola para reconquistar máximos históricos

Iberdrola es un imán para los inversores, espoleados por la venta de las trece centrales de ciclos combinados al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Una operación que se ha anunciado como una «nueva nacionalización» por parte del presidente mexicano y que serán operadas por la Comisión Federal de Electricidad. La operación dista de ser una expropiación, como sí ha sucedido con activos de empresas españolas en países de Latinoamérica.

Iberdrola se embolsará 5.500 millones de euros, que abonará el fondo estatal México Infraestructure Partners. En total, la desinversión afecta al 80% del negocio de la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán en el país de América Central.

El mercado ha aplaudido la operación e Iberdrola ha recuperado en Bolsa más de 1.700 millones en 24 horas, hasta alcanzar una capitalización bursátil de casi 74.000 millones de euros. Iberdrola tendría así vía libre para superar niveles y reconquistar los 12,56 euros, sus máximos históricos, mientras pone rumbo y con el viento de cola para cumplir su plan estratégico.

IBERDROLA Y LA NACIONALIZACIÓN DE MÉXICO

Los 5.500 millones de liquidez serán un buen catalizador para la energética, un montante que cubre con creces el dividendo de este 2022, incrementado este pasado mes de febrero en un 9%, hasta los 0,49 euros por título. En total, la eléctrica abonará 3.158 millones de euros a sus accionistas este 2023. Asimismo, tendría un remanente de 2.342 millones de euros de la operación para acometer su plan de inversiones.

Andrés Manuel López Obrador e Ignacio Sánchez Galán, presidentes de México e Iberdrola, respectivamente
Andrés Manuel López Obrador e Ignacio Sánchez Galán, presidentes de México e Iberdrola, respectivamente

Con el ascenso del 2,45% de este miércoles, Iberdrola se anota más de un 6% en el cómputo del año. En el arranque de abril, la eléctrica acumula una revalorización del 3,5%. La principal empresa del sector energético en España se desentiende por completo de las fuertes turbulencias financieras. Todo ello, por una operación que abarca una producción de más de 8.500 MW, de los que 8.436 MW son de ciclos combinados.

La nacionalización supone un paso firme en pro de la independencia energética en el país

Para el Gobierno de López Obrador, la nacionalización supone un paso firme en pro de la independencia energética en el país, una política que el presidente de México llevó en su programa y que en un principio se temía que siguiera el camino de Cristina Fernández de Kirchner en Argentina. Los fantasmas de las expropiaciones han revoloteado en sus medidas, pero por ahora se están materializando con compras. Las dudas se encuentran en si la operación se ha realizado a precios de mercado o bien con alguna rebaja.

IBERDROLA CONSIDERA A MÉXICO COMO UN PAÍS ESTRATÉGICO

Pero Iberdrola considera a México como un país estratégico, tal y como a señalado Sánchez Galán, tras cerrar este acuerdo. A juicio del máximo dirigente de la compañía vasca, se trata de una nación con un enorme «potencial de crecimiento y expansión».

En los últimos años, los ataques de la izquierda mexicana a Iberdrola se han sucedido. El propio López Obrador acusó a Iberdrola de «torpedear» la reforma eléctrica del país, su medida estrella, y dirigió sus críticas también a otras compañías españolas. Cabe recordar que el pasado año, México cortó las relaciones cordiales con España.

México es un país importante para la eléctrica, pero ahora el foco está puesto en otros mercados, como Reino Unido, Brasil y especialmente Estados Unidos. Además, Iberdrola congeló sus inversiones en el país tras los desencuentros.

Desde el pasado 2022, Iberdrola se ha enfrentado a serios problemas para poner en marcha algunas instalaciones de ciclo combinado que no lograba arrancar por los constantes retrasos de los permisos gubernamentales, un extremo que se habría convertido en el detonante para esta fuerte reducción del peso de Iberdrola en México. No obstante, la sangre finalmente no ha llegado al río.

EL PLAN ESTRATÉGICO, CON VIENTO DE COLA

Para la operación, Iberdrola ha contratado a Barclays y Backer & McKenzie, para la parte financiera y legal, respectivamente. Como es habitual, esta transacción está sujeta a la autorización de los organismos pertinentes y al cumplimiento de las condiciones.

Aún así, Iberdrola tiene la previsión de invertir 47.000 millones de euros entre este 2023 y 2025 tras alcanzar un beneficio récord de 5.200 millones a cierre de 2022, con unas ventas en España de casi 4.100 millones de euros, un 17% más respecto al ejercicio anterior. Además, el grupo contempla un nuevo objetivo de 4.900 millones de euros en el periodo 2023-2025 procedente de su plan de rotación de activos, que será sobre un 3% de sus activos totales.


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