Existen muchos motivos para comer merluza. Primero, porque es un pescado que, bien cocinado, puede resultar realmente sabroso. Pero además resulta realmente completo de cara a una dieta sana, gracias a la gran cantidad de vitaminas, minerales y grasas buenas que aporta al cuerpo. ¿Quién no ha escuchado las recomendaciones de los dietistas a la hora de aconsejar consumir pescado cada semana? Pues la merluza puede considerarse una de las opciones más interesantes, entre otras cosas porque permite un montón de recetas distintas con las que probar.
Por supuesto, mucha gente de dieta también acude a este pescado, ya que ayuda a perder peso y es suave para el estómago. Como decíamos, hay muchas maneras de comer merluza, y la mayoría están francamente bien, pero lo más probable es que si tuviésemos que decantarnos por una, esa sería la merluza en salsa. Una auténtica delicia que tiene otra ventaja añadida: es facilísima de preparar. ¿Quieres sorprender a alguien con una receta elaborada que en el fondo se haga rápido? Pues toma nota.
Terminar la merluza en salsa
Ya solo quedaría freír la merluza. Con ella perfectamente rebozada, se fríe en una sartén con un poquito de aceite. No es un pescado de requiera demasiado tiempo, como hemos señalado antes, así que con dejarlo dos o tres minutos por cada lado, hasta que tenga una apariencia realmente deliciosa, suele ser más que suficiente.
Si además se quiere acompañar el plato con una ensalada o unas patatas fritas cortadas en cuadraditos, mejor que mejor.
