Castilla la Mancha no deja de sorprender. En su momento fue el escenario de las múltiples aventuras de Don Quijote de la Mancha, escrito por Miguel de Cervantes, que a lomos de su caballo recorrió toda la geografía manchega. Una novela que recogió los principales parajes de la comunidad, aunque en aquel tiempo era considerada una zona de paso y que conectaba el centro y norte de la península con Andalucía. Probablemente, Cervantes conociera La Mancha en el transcurso de su actividad como recaudador de impuestos para el rey en Castilla y Andalucía.
Uno de estos parajes que guarda en su interior Castilla la Mancha es las Lagunas de Ruidera, donde escribió algunos de los pasajes de su obra y en la que dejó constancia. «…solamente falta Ruidera y sus hijas, y sobrinas, las cuales lloran, por compasión que debió tener Merlin de ellas, las convirtió en otras tantas lagunas, que ahora en el mundo de los vivos y en la provincia de La Mancha las llaman Las lagunas de Ruidera», escribió Cervantes. En la actualidad es el enclave natural cervantino por excelencia y sin lugar a dudas escenario de las aventuras de Don Quijote y Sancho.
Es en este enclave donde se sitúa una de las fincas más caras de la comunidad, comercializada por Sotheby’s, y que tiene un precio de 25 millones de euros. En una superficie de 2.500 hectáreas se sitúa el complejo Cañada de la Manga, una finca en la que también se encuentra situado un centro turístico y de ocio y que cuenta con 78 hectáreas adicionales. El entorno, uno de los Parques Naturales de la comunidad castellano manchega, es un conjunto kárstiko modelado por la acción de las aguas del Alto Guadiana durante siglos y cuentan con una extensión de 30 kilómetros. Un gigantesco sistema lagunar cuyo rasgo más característico, las barreras tobáceas, permiten la comunicación entre todas ellas a través de cascadas y bellísimos saltos de agua.
Igualmente, dentro de la finca una parte está también dedicada al sector agrícola. La extensión de estas tierras puede dividirse en 281 hectáreas de regadío y 780 dedicadas al secano, pero que pueden ser fácilmente ampliables. Su producción agrícola, que además está gestionada profesionalmente, está destinada a obtener los mayores beneficios mediante el cultivo de cereales A su vez, la mayor parte de los terrenos de la finca puede utilizarse para la caza menor de perdices, conejos y liebres.
Dentro de la finca hay una parte que se puede dedicar a la producción agrícola
DISPOSICIÓN DE LOS EDIFICIOS
La casa de campo tiene dentro de su complejo varios edificios. El principal de ellos tiene 30 habitaciones que permiten acomodar a más de 60 personas en cuatro viviendas unifamiliares y un área común a todas. Igualmente, cuenta con un gran número de cuartos de baño y una enorme sala de estar para 50 personas. Estas casas de campo múltiples forman un diseño rectangular alrededor de un gran patio central. Fuera de la estructura rectangular principal, hay patios y jardines adicionales, así como una amplia piscina.
Por otro lado, hay tres casas para sirvientes, gerentes y personal de seguridad. Igualmente, dentro del recinto, existe una plaza de toros, perfecta para pequeñas corridas y presidida por una torre de dos plantas. Se trata de un lugar interesante para la organización de eventos y reuniones sociales.
En los almacenes alrededor de la plaza de toros hay un museo con objetos históricos, pero estos no están incluidos en la oferta final. Por otro lado, también existen otros edificios, como una bodega, almacenes utilizados para almacenar maquinaria y un establo.
Las instalaciones y el equipamiento son especialmente destacables cuando se trata de cumplir con los más altos estándares de la caza deportiva. Cañada la Manga es conocida por el carácter de sus perdices y su terreno. Esto último la hace única en la práctica de la caza deportiva. Las instalaciones para la cría de la perdiz garantizan y aumentan su población natural. Con ellas, la disponibilidad de la caza está asegurada de forma sostenible. La caza mayor es estacional, principalmente de jabalí. La organización de eventos de caza mayor no sólo es rentable, sino que se recomienda por razones de sostenibilidad.