Enaire ha presentado el proyecto Cielo Único Digital Europeo, que busca transitar del espacio aéreo actual fragmentado hacia un espacio aéreo continuo y ‘sin fronteras’ que pueda satisfacer las necesidades futuras de la sociedad en cuanto a capacidad, seguridad, eficiencia e impacto ambiental.
La iniciativa ha sido mostrada en la ‘II Cumbre española de obra civil aeroportuaria’ organizada por el Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España (COIAE), donde Enrique Maurer, director de Servicios de Navegación Aérea de Enaire ha presentado varios de los proyectos de innovación de la compañía durante la mesa redonda ‘Innovación: cómo adaptar las infraestructuras a las necesidades de un transporte aéreo sostenible’.
Junto a él, han formado parte de la mesa redonda Jaime Armengol, coordinador Mobility City de la Fundación Ibercaja, y Adrián Muelas, asesor del gabinete técnico de la secretaría general de transportes y movilidad del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
En materia de drones y movilidad aérea urbana, Maurer ha destacado el proyecto ‘U-Space’, que persigue la evolución del sistema de control de tráfico aéreo hacia un sistema más digitalizado y en el que Enaire «quiere jugar un papel importante en su condición y experiencia como proveedor de tránsito aéreo usando sistemas ATM», ha afirmado Maurer.
Además, ha señalado que la entidad se encuentra inmersa en un proyecto para «demostrar con pruebas en vuelo la viabilidad y los beneficios de interconectar aeropuertos y vertipuertos (así se denominan estas nuevas infraestructuras destinadas a los drones y aerotaxis eléctricos) de la ciudad a través del concepto de Urban Air Mobility para el transporte de personas y mercancías».
Enrique Maurer ha analizado los factores a tener en cuenta en este tipo de proyectos. En primer lugar, la necesidad de disponer de un marco regulatorio flexible y adaptable a la evolución del sector.
En segundo lugar, la tecnología, que permita «mantener la separación automática entre vehículos, y un mayor número de operaciones con las más altas cotas de seguridad», según ha apuntado.
En tercer lugar, la percepción de la sociedad, puesto que «serán los futuros usuarios los que generarán la tracción necesaria que hará rentable el sector, y dará justificación a las inversiones en plataformas aéreas, en infraestructura ‘U-Space’, a la par que orientarán la evolución regulatoria».
En materia de navegación aérea, Maurer ha repasado algunas de las iniciativas incluidas en el plan estratégico de Enaire, Plan de Vuelo 2025, en las que la entidad se encuentra trabajando.
Uno de ellos es la implantación de torres remotas, donde Enaire está diseñando «una solución futura de Torre Digital que pretende lograr una imbricación mayor del sistema con el concepto de operaciones, pudiendo además lograr eficiencias derivadas de la implantación multi-dependencia de forma digital y remota», ha apuntado.
Además, ha querido destacar el proyecto en curso para la provisión de servicios de vigilancia y comunicaciones satelitales usando tecnología ADS-B, el proyecto para convertir a Enaire en proveedor de datos certificado (ADSP), la implantación del concepto Free-Route para la mejora de la sostenibilidad en el espacio aéreo y la implementación del servicio FIS VFR para 2022.
A juicio de Enrique Maurer, la navegación aérea se encuentra inmersa en un «cambio de paradigma resultado de la evolución tecnológica, la creciente automatización y digitalización y la globalización de los sistemas».
Por ello, ha explicado que «las soluciones basadas en navegación, comunicaciones y vigilancia satelital han irrumpido con fuerza en el escenario del transporte aéreo por la capacidad de globalización que ofrecen y han propiciado un cambio en los procedimientos de espacio aéreo a una navegación por prestaciones (PBN, precisión, integridad, continuidad y disponibilidad) que permiten una mejora clara de la sostenibilidad medioambiental.