Los ingresos de la restauración aumentaron antes de la pandemia hasta los 25.000 M€

La facturación del sector de restaurantes aumentó un 3% en 2019, hasta alcanzar los 25.340 millones de euros, según el informe ‘Cadena de restaurantes’ del Observatorio Sectorial DBK de Informa.

El estudio señala que los restaurantes con servicio en mesa alcanzaron unas ventas conjuntas de 20.670 millones, un 2,6% más que en 2018. Dentro de este segmento destaca el peso de la restauración tradicional, que supuso el 84% del total, mientras que la restauración informal acaparó el 16% restante.

Por otro lado, el negocio de los restaurantes sin servicio en mesa registró un aumento del 5,2% en 2019, hasta cifrarse en 4.670 millones de euros, sobresaliendo el dinamismo del subsegmento de comida rápida.

DELIVERY

En los últimos años, las ventas del servicio ‘delivery’ han registrado un significativo crecimiento, en paralelo al dinamismo de la demanda, la proliferación de plataformas de reparto y la incorporación de este servicio a un número creciente de establecimientos, según Informa.

Por ello, en 2019 el servicio ‘delivery’ representó en torno al 6% del negocio en el conjunto del sector de la restauración.

Además, el 39% de los ingresos totales del sector correspondió ya a locales integrados en cadenas, participación que ha registrado una tendencia al alza en los últimos años.

PESIMISMO EN 2020 

Según DBK, la pandemia ha tenido un impacto muy negativo en el sector, provocando una fuerte caída de los ingresos debido al cierre temporal de locales, las restricciones en cuanto a movilidad y aforos y a la pérdida de capacidad de gasto de la población ante el deterioro de la coyuntura económica.

Tras varios años de crecimiento en el número de establecimientos, llegando a superar los 80.000 en enero de 2019, el ejercicio 2020 cerrará previsiblemente con un fuerte descenso del número de restaurantes operativos, tendencia que se prolongará en 2021.

A pesar de la gradual concentración en los operadores líderes, la estructura empresarial se caracteriza por la presencia mayoritaria de empresas de pequeño tamaño, dando lugar a una fuerte atomización del negocio.

Las diez primeras empresas reunieron una participación conjunta del 11,9% sobre el valor total del negocio en 2019, la cual se situó en el 14,46% al considerar a las veinte primeras compañías.