No cabe duda de que el desayuno es la comida más importante del día, aunque muchos españoles prefieren dormir cinco minutos más, y saltarse esta parte del día. Pero como dice el dicho: “Desayuna como un rey, almuerza como un príncipe y cena como un mendigo”. Y aunque no son pocas las opciones que tenemos, la avena debería estar entre ellas.
No es un desayuno muy popular, ya que lo normal son unas tostadas con mantequilla, pan con aceite, o unos cereales. Pero la avena es también muy fácil de preparar, además de que son muchos los beneficios que esta proporciona. A continuación, conocerás todo lo que sucederá en tu cuerpo si comes avena cada día.
Recetas con avena
Si ya conoces la avena, la has probado y no se ha convertido en santo de tu devoción, aquí tienes la solución para cambiar de parecer. Y es que hay muchas formas de prepararla, solo tienes que encontrar la que más te guste.
Barritas de avena y plátano. Ingredientes:
Necesitarás 2 plátanos, 1 cucharada de esencia de vainilla, 2 tazas de avena, ½ cucharadita de sal, ¼ de taza de nueces y otra de dátiles picados y canela.
Preparación: Empieza aplastando los plátanos hasta que sean un puré, y entonces añade la esencia de vainilla, la sal, los dátiles, las nueces y la avena. Mezcla hasta conseguir que todos los ingredientes estén bien integrados. Prepara una bandeja de horno y extiende tu preparación de forma pareja, espolvorea canela por encima y deja en el horno durante 30 minutos. Cuando veas que los bordes están crujientes, saca del horno, deja enfriar y corta en forma de barritas.
Batido de avena y zanahoria. Ingredientes:
Necesitarás el zumo de 3 naranjas, 1 taza de agua, 2 cucharadas de avena y 1 zanahoria.
Preparación: Sólo debes poner todos los ingredientes en una batidora y a batir. Lo único que tendrás que hacer antes de esto será cortar la zanahoria en pedazos más pequeños y a disfrutar de una receta bien rica y fácil, por no hablar de lo rápida que es. Si eres de los que duerme hasta el último minuto para no dejar la cama, esta es tu receta ideal.
