martes, 28 mayo 2024

Los secretos que guarda la casa de Picasso en Lavapiés

Pablo Picasso nos ha dado mucho por contar. A través de sus obras, nos muestra una forma de mirar y comprender trazos de vida que él supo plasmar a su realidad. Sin embargo, cuando todavía era un adolescente, Picasso ya mostraba una habilidad impresionante para su edad, decidiendo partir a una temprana edad a la ciudad de Madrid, plantándose en el barrio de Lavapiés.

Desde entonces, Picasso ya era capaz de pintar gran cantidad de figuras ciñéndose con naturalidad a las normas más conservadoras de la composición académica, por lo que necesitaba una escuela en la que canalizar y pulir de la mejor forma ese arte. Eligió la Academia de Bellas Artes, pero donde dejó parte de sus primeras historias fue en su casa de Lavapiés.

5
Una estancia de nueve meses antes de hacer de nuevo su regreso

Una estancia corta antes de regresar

A tenor de estas casualidades que se fue encontrando Picasso tras salir de la que era su Málaga de cuna, se cuenta que también aprendió mucho del propio Fernando Mora, del cual tiempo después se le rememora en una de sus obras.

No obstante, poco más (o casi nada) se conoce del resto de su estancia en el barrio madrileño, donde Picasso permaneció por un tiempo de unos nueve meses, comprendidos entre los 16 y 17 años de edad.

Esta etapa del ilustre pintor fue antes de salir de Madrid para dirigirse a Barcelona y para retomar más tarde el camino de nuevo a la capital, en esta ocasión teniendo su lugar en la Calle Zurbano. Esa escena mural de Pablo junto a Isbert es de las más clásicas, dando paso a una de las cabeceras de Lavapiés y por las que todo el mundo debe sentirse en la obligación de pasar por aquí.

Jorge Majdalani
Jorge Majdalani
Periodista, redactor de Estilo de vida en MERCA2 dedicado a toda su actualidad. Especializado en el deporte motor y su frente automovilístico, llevo más de 10 años de entrega en el mundo de la redacción de contenidos. Curioso aprendiz y contador de historias.

- Publicidad -