El otro drama del coronavirus: ¿Más violencia machista?

Toca pasar tiempo en casa. Estamos confinados y en estado de alarma, no queda otra que convivir con aquellos con los que vivamos bajo un mismo techo. Algunos estarán pasando la cuarentena con sus familias, con compañeros de piso, con sus padres, o con sus parejas.

Sin embargo, si lo pensamos bien, aquellos que no disfrutan de una relación sana con sus parejas o cónyuges pueden ver convertido este periodo de aislamiento en una pesadilla. Precisamente porque estamos separados del resto de seres queridos y totalmente aislados, las mujeres que sufren violencia de género en casa podrían llegar a sufrir más que nunca, ¿es esto posible?

Según las estadísticas de la Coalición Nacional contra la Violencia Doméstica de Estados Unidos, casi una de cada cuatro mujeres y uno de cada nueve hombres experimentan violencia o violencia sexual entre la pareja. Según las cifras que maneja este centro, 20 personas sufren violencia física por parte de su compañero sentimental cada minuto en el país norteamericano.

Tal y como indica Katie Ray-Jones, CEO de la Línea Nacional de Violencia Doméstica, el confinamiento tendrá un impacto en los casos de violencia de la pareja. Ray-Jones asegura que, aunque tal vez el repunte no sea inmediato, bastará un tiempo más aislados para que comiencen a llegar llamadas. En realidad, el CEO apunta a que durante periodos de convivencia en los que la víctima se encuentra muy cerca de la pareja, como es el caso de las vacaciones o, ahora, el aislamiento, es menos probable que se produzcan llamadas. Esto sería así debido a la dificultad de encontrar un momento a solas o un espacio seguro para hacerlo.

Por tanto, un aislamiento como el que estamos viviendo puede limitar «la capacidad de la víctima para buscar ayuda y recursos de manera segura», según Ray-Jones.

2
A LAS VÍCTIMAS DE VIOLENCIA MACHISTA: «SIEMPRE PUEDES IRTE»

Andrea Glik, una terapeuta de traumas, explicó al medio Refinery29 que muchas personas que viven con parejas o personas abusivas podrían no tener el lenguaje para entender que están siendo abusadas. «Muchas personas viven con parejas abusivas y no tienen ese lenguaje porque solo hemos conceptualizado que la violencia doméstica está en: 1. relaciones directas 2. abuso físico (cuando el abuso también puede ser emocional o financiero o sexual) y 3. porque incluso si están en una relación directa que es físicamente abusiva, su pareja puede dejarlos sin gas para creer que se merecen el tratamiento que están recibiendo, o es su culpa», indica Glik.

La terapeuta envía un mensaje: «Si su pareja lo intimida, lo aísla o lo manipula, sepa que nunca está bien ser tratado de esta manera». También incide en que los patrones de abuso en las relaciones directas pueden ser diferentes de cómo se ve el abuso en las relaciones LGBTQ+ o situaciones de violencia doméstica que involucran a la familia.

“Siempre puedes irte. Nunca estás tan atrapado como ellos [un abusador] dicen que estás. Alguien te abrirá su hogar», asegura Glik.

Siguiente