El videojuego español, entre la parálisis política y las falsas promesas

Como si de un deja vu se tratase, el sector del videojuego español repite en la presentación de su libro blanco las mismas peticiones al Gobierno que hace un año. Establecer un incentivo fiscal a la producción de videojuegos y diseñar un esquema de reinversión de las multinacionales en el videojuego. Así son las dos peticiones más urgentes dentro de un decálogo de medidas con las que este sector busca incentivar la industria del videojuego.

El sector facturó en 2018 la cantidad de 813 millones de euros. Paralelamente, el número de empresas ha crecido hasta situarse en 520 y el número de empleados en el sector se acerca a los 7.000. A pesar de unos datos que revelan cierto optimismo, los problemas y limitaciones siguen siendo los mismos. Falta de financiación, de inversores y ayudas escasas, entre otros.

Desde la Asociación Española de Desarrollo de Videojuegos (DEV) aseguran que, tras muchas promesas, son conscientes de que el Gobierno no va a incluir la petición relativa al incentivo fiscal en los Presupuestos Generales del Estado. Sin embargo, tienen noticia de que algunos grupos parlamentarios presentarán una enmienda para llevar esta cuestión a debate.

El hecho de que las medidas que conforman el decálogo sean las mismas que hace un año lleva a pensar en el abandono de la industria del videojuego por parte de las instituciones. En el tema de ayudas, el nuevo titular del Ministerio de Cultura aseguraba hace unos días que daría continuidad al programa de ayudas iniciado por su antecesor. A través de este programa se otorga a una dotación de 2,5 millones de euros a esta industria. El resto de ayudas proceden de las arcas comunitarias, que apuntan desde DEV, «son modestas, pero ayudan mucho a estudios pequeños».

Entre la lista de peticiones para impulsar una industria en crecimiento, destaca una nueva demanda: «Crear una modalidad de empresa sin actividad económica». Desde la asociación proponen crear esta modalidad de negocio, puesto que, la naturaleza de microempresas que predomina en el sector así lo demanda. Los gastos son muy elevados, y llegan mucho antes que los ingresos. Y la realidad del sector demuestra que la situación actual lleva a los emprendedores a prevender derechos o genera problemas con la propiedad intelectual y el acceso a ayudas públicas.

EDUCACIÓN Y MUJERES: EL TALÓN DE AQUILES

La formación es la base para la prosperidad de la industria. En España hay cantera, pero con matices. La formación que se imparte es muy generalista y las empresas siguen en su reivindicación: el 57% de ellas se quejan de la falta de profesionales con la formación adecuada. El puesto de programador sigue siendo el más demandado por las empresas en un 53%, seguido de otros perfiles como diseño de juego y marketing y distribución.

La presencia de la mujer en el mundo del videojuego es la otra asignatura pendiente. Un año más encontramos que las mujeres solo representan el 16% en materia de empleo; mientras que, el porcentaje de gamers femeninas es el 41%. Por eso, desde DEV reclaman al Gobierno campañas con las que incentivar a las mujeres a decantarse por estudios que desemboquen en la industria del videojuego.