El agua del grifo y otros factores que inclinan la balanza en el cáncer de vejiga

Se habla mucho sobre los factores de riesgo a la hora de tener más probabilidades de tener cáncer o no. Realmente hay muchas incógnitas al respecto aún sobre el tema del cáncer que por desgracia tan solo presuponemos.

Los factores de riesgo son las cosas que hacen que aumenten tus papeletas de tener un cáncer. Sin embargo, hay personas que viven en una continua ruleta rusa y no lo padecen y otros enfermos de cáncer que no tenían ningún factor de riesgo o tan solo uno de ellos.

Hay algunos factores que puedes eliminar de tu vida para evitar incrementar el riesgo. No obstante, hay otros que te tocan de nacimiento y no puedes rechazarlos. Con respecto al cáncer de vejiga hay muchas cosas que puedes evitar y así no tener que lidiar con esta enfermedad. De todas formas, recuerda que la detección precoz de cualquier cáncer es crucial para superarlo o no.

Te diremos algunos factores de riesgo que tienes en tu vida.

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Cáncer de vejiga y agua potable

agua y cáncer

Es alarmante los datos que se han desvelado estos últimos días sobre la relación del cáncer de vejiga y el consumo de agua potable en nuestro país. El agua del grifo contiene una serie de químicos que le introducen al ser tratada que no son óptimos para la salud. Cada año el cinco por ciento de los casos de cáncer de vejiga es por culpa de exposición, consumo o inhalación de químicos.

El agua contiene una serie de compuestos volátiles de los químicos que la tratan que hace que tenga un efecto negativo sobre tu organismo. En concreto, España ocupa el cuarto lugar entre los países de Europa con un once por ciento de casos de cáncer de vejiga por esta causa.

El arsénico que se le añade al agua doméstica es uno de los factores de riesgo que incrementan las posibilidades de cáncer de vejiga. Normalmente el contenido de arsénico en los pozos o aguas de consumo público están reguladas por las normativas de seguridad vigentes.