La compañía automovilística Hyundai venderá 65.000 vehículos en España este año, lo que supondrá un crecimiento del 3,5% en comparación con 2019, una cifra que permitirá a la marca alcanzar una cuota del 5,15%, aunque no cumplirá el límite de emisiones de 95 gramos de dióxido de carbono (CO2) por kilómetro en el mercado nacional.
Tal como ha informado el director de Comunicación de la marca en España, Juan José Martínez, en 2019 Hyundai vendió en Europa más de 560.000 unidades, un 3,8% más, y alcanzó una cuota de mercado del 3,56%. Sin embargo, en España la firma entregó 62.766 vehículos, un 2,9% menos, posicionándose como la octava marca más vendida.
Con estas cifras, Hyundai registró un 5% de cuota de mercado en España, dato que la firma espera aumentar hasta el 5,15% este año, gracias a su gama de productos que está presente en «casi todos los segmentos».
De cara a este año, la marca espera que la media de sus vehículos entregados en España emitan 112 gramos de dióxido de carbono, lo que supone 17 gramos más del límite europeo. No obstante, la compañía ha asegurado que sin «ninguna duda» no pagará multas, ya que habrá otros países europeos que contribuyan más para tener una media inferior a los 95 gramos de CO2.
Aun así, Hyundai espera vender 3.000 vehículos eléctricos en España este año, más del doble que las 1.178 unidades que entregó el año pasado. Además, aumentará casi un 40% sus ventas de modelos electrificados, hasta 26.000 unidades, ya que el 85% de la gama tendrá versiones electrificadas.
«A nivel europeo queremos ser el mayor proveedor de vehículos ‘cero emisiones'», ha subrayado Martínez, quien ha informado de que a partir de marzo se comenzará a producir el Kona en la República Checa para reducir los tiempos de espera de los clientes.
En 2025, la marca tendrá 44 modelos electrificados y habrá vendido 670.000 unidades de modelos eléctricos puros y de pila de combustible. Además, espera situarse en el ‘top 3’ de fabricantes de coches eléctricos.
Para ello, la empresa automovilística japonesa invertirá 47.000 millones de euros hasta 2025 en la «movilidad del futuro», así como 6.700 millones de euros para el desarrollo de las pilas de combustible.