En las últimas décadas, la situación del mercado inmobiliario en España ha ido experimentando momentos muy variables: tanto positivos como otros de índole más negativa. El incremento en las cifras de turismo, la crisis económica o el crecimiento de algunas zonas urbanas son factores que han influido –y, en algunos casos, siguen haciéndolo- en el panorama inmobiliario, cambiando sus dinámicas de los actores que participan en él. No obstante, a lo largo de estas décadas también ha habido espacio para las novedades. En este escenario tan variado se han hecho un hueco nuevas iniciativas que, como la que lleva a cabo Second House en Barcelona y en otras ciudades españolas, son un ejemplo más de todas las posibilidades que puede ofrecer el sector.
Vender un edificio: con Second House es posible
La crisis económica ha dejado una huella importante en la sociedad española. Aunque poco a poco, los hogares españoles han ido recuperándose, pocos son los que se han olvidado de lo que supuso ese periodo. En el caso del mercado inmobiliario, los hábitos han cambiado, así como lo han ido haciendo los precios. Según un reciente estudio dedicado a la vivienda en España, el acceso a la vivienda de propiedad ya es, en la actualidad, una operación más fácil que antes de la crisis; un proceso contrario al que ocurre con la vivienda en alquiler. De este modo, hoy en día es más factible la posibilidad de acceder a una movilidad mayor, por ejemplo, vendiendo una vivienda o un edificio y comprando otro nuevo.
Así es, si dispone de un edificio en venta lograr un comprador es, hoy en día, posible gracias a proyectos como Second House. Se trata de una empresa cuya actividad principal se ubica en zonas como Barcelona y cuya especialidad es la compra de edificios. Su objetivo es fácil y sencillo: cuando un cliente decide poner un edificio en venta, Second House procede a su compra y posteriormente a su restauración y venta. De este modo, edificios en venta adquieren una segunda vida gracias a Second House.
A dicho proceso contribuyen elementos como el background en el mercado inmobiliario, que en el caso de SECOND House se traduce en un aval de 25 años de experiencia. De hecho, desde que esta empresa nació, en el año 1994, no ha dejado de crecer, atendiendo a las necesidades del mercado y demandas del cliente, dejando su huella en numerosos puntos geográficos de la metrópolis barcelonesa, como son el Born, Santa Eulàlia, Sants, Gràcia, Tres Torres, Eiample Dret y un largo etcétera.
Así mismo, además de la experiencia en el sector inmobiliario, la clave del éxito de Second House reside también en la profesionalización y especialización. Más concretamente, esta empresa centra su punto de actuación en fincas de menos de 3 millones de euros, a las que le aporta un valor añadido, diferente. Para ello, trabaja sobre su rehabilitación y mejora, así como sobre la adecuación de su situación jurídica haciéndola coincidir con la realidad física y sobre su rentabilidad a través de la actualización de contratos de arrendamientos y rentas.