BBVA lanza su primera oferta para la fusión con el Banco Sabadell y el Gobierno recela de la operación

La operación de fusión entre el BBVA y el Banco Sabadell va tomando forma a pasos agigantados. Mientras que el Gobierno, encabezado en la figura de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, desconfía de la operación y advierte que vigilará todos los movimientos.

La entidad presidida por Carlos Torres ya ha lanzado su primera oferta esta misma mañana proponiendo una fusión por absorción de Banco Sabadell con un canje de 1 acción de nueva emisión de BBVA por cada 4,83 acciones de Banco Sabadell, lo que supone una prima del 30%.

Además, ene ese mismo movimiento se da por hecho que no se realizarían repartos de dividendos, reservas o cualesquiera otras distribuciones por parte de ninguna de las sociedades a sus respectivos accionistas.

BBVA ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la carta enviada al consejo de administración del Sabadell en la que recoge la propuesta de la potencial operación de fusión entre ambas entidades. En esa misiva el BBVA revela que la forma de pago en la que se efectuaría esta fusión sería mediante una «ecuación de canje de 1 acción de nueva emisión de BBVA por cada 4,83 acciones de Banco Sabadell».

Esta ecuación de canje supone una prima del 30% sobre el precio de cierre de Sabadell y BBVA el pasado lunes 29 de abril, el día antes de conocerse esta potencial operación. La entidad indica, además, que implica una prima del 42% respecto a las cotizaciones medias ponderadas del último mes, y del 50% atendiendo a los tres últimos meses.

BBVA
Carlos Torres, presidente de BBVA

En la carta se detalla que BBVA atendería el canje de las acciones de Banco Sabadell mediante emisión de nuevas acciones ordinarias cuya suscripción estará reservada a los titulares de acciones de Banco Sabadell y sobre las que se solicitaría su admisión a cotización en el Mercado Continuo español y en los restantes mercados en los que cotizan sus acciones.

TRES CONSEJEROS DEL SABADELL, SEDE EN CATALUÑA Y MARCA BBVA

En la oferta concreta se propondría la incorporación como consejeros no ejecutivos al Consejo de Administración de BBVA de tres miembros del actual consejo de administración de Banco Sabadell, elegidos de común acuerdo entre ambas partes. Uno de estos consejeros sería propuesto como uno de los vicepresidentes del Consejo de BBVA.

Por otro lado, la entidad resultante de la fusión tendría una de sus sedes operativas del Grupo en Cataluña, que se establecería en el centro corporativo de Banco Sabadell en Sant Cugat. Mientras que la denominación social y marca serían las de BBVA, «aunque se podría mantener la utilización de la marca Banco Sabadell, de manera conjunta con la marca BBVA, en aquellas regiones o negocios en las que pueda tener un interés comercial relevante«, según se detalla en la carta enviada.

«SIN MEDIDAS TRAUMÁTICAS» PARA LA PLANTILLA

En cuanto a posibles ajustes de plantilla, la entidad indica que «en la integración de las plantillas se respetarían en todo caso los principios de competencia profesional y mérito, sin la adopción de medidas traumáticas o que afecten singularmente a los empleados con origen en una de las dos entidades».

En este sentido, señala que se constituirá un comité de integración con representantes de ambas organizaciones «con el fin de diseñar, con pleno respeto de la normativa de Derecho de la competencia, el mejor proceso de integración, buscando potenciar al máximo el talento existente en ambas entidades».

«El equipo directivo de la entidad resultante se conformaría con ejecutivos procedentes de ambos bancos, atendiendo a principios de competencia profesional y mérito, procurando guardar la proporcionalidad en función del peso relativo de los negocios», subraya.

«teníamos un país en el que la concentración bancaria era del 40%, hoy está en el 70% y, si se me permite, casi en régimen de oligopolio»

Yolanda Díaz

Por otor lado, como era de esperar este movimiento ha chocado para empezar con la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz que ha afirmado que «teníamos un país en el que la concentración bancaria era del 40%, hoy está en el 70% y, si se me permite, casi en régimen de oligopolio», añadiendo además que cree que esta fusión podría conllevar un expediente de regulación de empleo, dudando de esta forma de la promesa hecha por las entidades bancarias de respetar las plantillas.

La vicepresidenta también entiende que, en caso de llevarse a cabo la operación, se «perjudicará» al servicio bancario y supondrá «más exclusión financiera», con un «deprecio» en la atención y el servicio público a la ciudadanía. «Sin lugar a dudas, va a empeorar la calidad del servicio», ha lamentado.

Díaz ha explicado que es algo que ya ha hablado con sus socios de Gobierno y que tratará «en la intimidad» esta cuestión, si bien ha adelantado que desde el Ejecutivo hay «sin lugar a dudas» capacidad para «exigir garantías de empleo» en caso de salir adelante la fusión entre las dos entidades bancarias.

«Estamos hablando de un mercado de trabajo con personas en desempleo, con procesos que, además, normalmente estas fusiones se aprovechan para el cierre de oficinas y despidos muy importantes: no operan en la lógica de emplear o incorporar personas para otras funciones que ahora mismo son claves», ha alertado.

La vicepresidenta cree necesario «hablar en una democracia» del reparto de la riqueza y de los beneficios y asegura que tendrá un debate con el sector bancario «sentada en la mesa con ellos», en un momento en el que «hay una transferencia de rentas de la ciudadanía a la banca brutal».

Yolanda Díaz
Yolanda Díaz, ministra de Trabajo

ACTIVOS POR ENCIMA DEL BILLÓN DE EUROS

En la misiva, BBVA subraya que la combinación de ambas entidades daría lugar «al proyecto industrial más atractivo de la banca europea. En este sentido, destaca los beneficios de la fusión para ambas entidades, sus accionistas, empleados, clientes y las sociedades en las que operan».

BBVA asegura que la nueva entidad «se convertiría en una de las mayores y más sólidas entidades financieras en Europa, con activos totales por encima del billón de euros y más de 100 millones de clientes a nivel mundial, con la ambición de ser el mayor banco por capitalización bursátil de la zona euro».

La entidad que preside Carlos Torres dice que «la mayor escala permitiría afrontar en mejores condiciones los retos estructurales del sector y llegar a un mayor número de clientes, abordando de forma eficiente las inversiones en transformación digital. La entidad combinada sería más sólida y eficiente, y un referente en el mercado por volumen de activos, créditos y depósitos».

Por otra parte, BBVA destaca el encaje estratégico y complementariedad de ambas compañías, siendo Banco Sabadell el referente en España en el segmento de empresas y, al igual que BBVA, una entidad líder en digitalización y sostenibilidad. Además, la presencia de Banco Sabadell en Reino Unido se sumaría a la escala global de BBVA y su liderazgo en México, Turquía y América del Sur.

La fusión quedaría sujeta a la obtención de las correspondientes autorizaciones o declaraciones de no oposición pertinentes de los supervisores competentes (en particular, la autorización de la persona titular del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa) y de las autoridades de defensa de la competencia con jurisdicción (en particular, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia).

ECONOMÍA VELARÁ POR LA COMPETENCIA

Por su parte, ministerio de Economía y Hacienda ha avisado este miércoles ante el anuncio de una eventual fusión entre el BBVA y el Banco Sabadell, de que la operación, de concretarse, deberá respetar el principio de competencia y mantener los avances logrados en los últimos años en materia de «inclusión financiera».

Así lo aseguran fuentes del Ministerio de Economía que dirige Carlos Cuerpo, que remarcan la importancia de mantener un sector financiero «competitivo» y hacen hincapié en que actualmente el sector está «saneado» y es «solvente».

Aunque desde el Ejecutivo se reclama «prudencia» pues por ahora se está hablando sólo de un anuncio de esa eventual fusión, las mismas fuentes garantizan que la operación se someterá a estudio «por los canales adecuados».

En concreto, destacan que será analizada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que velará por «lo que pudiera afectar en términos de competencia» y «protegiendo los avances tan importantes conseguidos en los últimos años en materia de inclusión financiera».