Mary Schlangenstein y Michael Sasso para Bloomberg.
Los inversores en aerolíneas estadounidenses, que ya exponen el peor desempeño del 2017 en la Bolsa, se preparan para nuevas decepciones. El índice de Standard & Poor, compuesto por las cinco líneas aéreas norteamericanas más grandes, disminuyó 7,5% en agosto, lo equivalente a 10.000 millones de dólares (8.400 millones de euros) en valor de mercado. Las acciones caían a medida que se agudizaba la guerra de precios que inició United Continental y otros grandes operadores siguieron.
Los analistas tienen nuevas decepciones por delante. Tres aerolíneas, encabezadas por Delta Air Lines, recortaron este martes sus previsiones de ingresos para el tercer trimestre. UBS Group predijo que el resto tendrá que imitar ese movimiento. La tendencia es preocupante porque las principales aerolíneas se han jactado de que la consolidación de la industria les conduciría a beneficios estables y mejores rendimientos para los accionistas, y no a constantes guerras de precios con sus rivales low cost.
Tres aerolíneas estadounidenses recortaron este martes sus previsiones de ingresos
“Si vemos hacia los últimos 30 o 45 días, no hay duda de que United empezó un recorte de tarifas para alejar a Spirit, Frontier, o quien fuese, y eso se extendió en toda su competencia”, expuso Gary Bradshaw, gestor de carteras en Hodges Capital Management en Dallas, que posee una participación en las principales aerolíneas.
El huracán Harvey, que cerró los aeropuertos de Houston durante varios días durante la semana pasada, fue otro obstáculo a las ganancias debido a las cancelaciones de vuelos y al alza de precios del combustible para aeronaves.
Los ingresos por vuelo de Delta durante este trimestre han subido de 2% a 3%, en lugar de la tasa del 2,5% a 4,5% del anterior período. Las expectativas en su margen de operaciones es del 16,5% en vez del 20% anterior. Delta echó la culpa a la “lenta recuperación en los precios de los boletos locales” comprados en fechas cercanas a los viajes y a mayores costos del combustible por el huracán Harvey.
Bajada de expectativas
JetBlue Airways redujo el rango de sus ingresos por unidad este martes y citó “el entorno competitivo actual de precios en la industria”. La aerolínea calculó que el indicador bajaría 1% en comparación con un rango previo de 0,5% a 2,5%. Spirit Airlines culpó a los “precios competitivamente agresivos” cuando tuvo que reducir sus expectativas de ingresos en el tercer trimestre, que ahora caerán hasta 8,5%, más del doble del pronóstico previo de 4%.
Lo cierto es que las acciones de Spirit cayeron 4,5%, mientras que Delta retrocedió 3,5% y JetBlue otro 3,3% al cierre en la Bolsa de Nueva York. El índice de las aerolíneas del S&P descendió 2,8%. Probablemente United y Southwest Airlines tengan que disminuir también sus previsiones de ganancias en el tercer trimestre, según Darryl Genovesi, analista de UBS.
Spirit culpó a los “precios competitivamente agresivos” cuando tuvo que reducir sus expectativas
La batalla de precios que inició este verano entre United y otros grandes operadores como Spirit o Frontier se ha extendido desde entonces, incluyendo a American Airlines y a Southwest. Desde el 30 de junio, el índice de aerolíneas del S&P ha caído más de 14%.
Los precios de la industria se redujeron en julio respecto al mes anterior y en agosto “parece haberse profundizado la tendencia”, indicó Helane Becker, analista de Cowen & Co, en una nota. Si bien las aerolíneas esperan mejorar en los últimos tres meses de 2017, “la tendencia de precios actual no es favorable”.
Huracán Harvey
Del huracán Harvey sólo se espera que exacerbe los problemas de la industria. Los precios del combustible para aviones subieron 26% desde que la tormenta tocó tierra el 25 de agosto en Texas provocando la obstrucción de dos oleoductos que transportaban gasolina y productos refinados desde la Costa del Golfo. La recarga de combustible es el segundo gasto más importante de las aerolíneas estadounidenses, justo detrás del pago de personal.
Las líneas aéreas “pueden resolver usando otros oleoductos como fuentes de suministro, pero este sería un dolor de la cabeza más para la industria”, comentó Gary Kelly, director ejecutivo de Southwest. Agregó que aunque no se prevé una escasez del producto, está “muy preocupado por el cierre de los canales de conducción”.
«Se pueden usar otros oleoductos, pero este sería un dolor de la cabeza para la industria”
Se espera que durante la conferencia de transporte que iniciará este miércoles en Boston, algunas aerolíneas estadounidenses actualicen a la baja sus pronósticos de ingresos correspondientes al tercer trimestre del año. Otras podrían modificar sus previsiones de ganancias en base a los informes mensuales de tráfico.
Mirada optimista
David Vernon, analista de Sanford C. Bernstein, no cree que la actual competencia de precios implique grandes pérdidas para las aerolíneas. Muchas de las batallas ocurren en las rutas más competitivas, como la que conecta a Nueva York con el sur de la Florida, donde las boletos aéreos ya son bastante económicos. A juicio de Vernon, Wall Street “está viendo la parte más competitiva del mercado y usándola como una analogía para toda la industria”.
Vernon cree que con el implemento de tarifas más económicas, las grandes aerolíneas podrían competir finalmente con empresas como Spirit sin tener que bajar los precios en todas las rutas. Bradshaw, por su parte, aseguró que Delta incrementó sus dividendos 50% a inicios de año, lo que sugiere que la línea aérea confía en que no será derrotada en la guerra de precios.
“Wall Street está viendo la parte más competitiva del mercado y usándola como una analogía para toda la industria”
United espera que su ingreso unitario baje 1%, mientras que Southwest prevé que suba 1%. Los inversores se mostraron decepcionados ante ambas estimaciones, realizadas en julio pasado. Scott Kirby, presidente de United, se negó a hacer comentarios al respecto, pero confirmó que la aerolínea publicaría una actualización esta semana. American dijo que su ingreso subirá 0,5%, después de que a inicios de año incrementara 2,5%.
Descuentos a juego
American y United seguirán ofreciendo precios igual de bajos en sus aeropuertos principales, informaron ejecutivos de ambas compañía. La tarifa económica, que le permite a los pasajeros llevar consigo sólo un equipaje de mano, ayuda a amortiguar el impacto porque las aerolíneas limitan el número de asientos disponible. “Vamos a competir contra cualquiera que elija enfrentarse a nosotros”, advirtió Kirby en una entrevista la semana pasada. “Esta es la estrategia correcta”.
La página web de United mostraba este martes un precio de 50 dólares (41,95 euros) para un vuelo de ida entre Nueva Jersey y Florida. El de ida y vuelta en la misma ruta tenía un precio de 139,50 dólares (117,03 euros) sin impuestos, partiendo el 7 y regresando el 12 de septiembre. Con iguales fecha y destino, Southwest ofrecía una opción más barata, dejando los boletos en sólo 122,38 dólares (102,67 euros). En ambas aerolíneas estadounidenses, los pasajes low cost tenían una disponibilidad limitada.