Aunque el suministro de mascarillas es bastante más satisfecho en la actualidad, no todos pueden permitirse comprar suficientes unidades como para cambiarlas según las recomendaciones de los fabricantes. Por tanto, la mayoría de las personas está desinfectando sus mascarillas, incluso si son desechables. De esa forma pueden alarga algo su vida, aunque podrían estar reduciendo su efectividad si la desinfección no se hace correctamente.
Según los estudios, si las mascarillas se mojan o no están bien limpias, su efectividad se ve afectada. Por eso es importante una buena desinfección y conocer cuáles son los límites de cada tipo de mascarilla.
Todo lo que necesitas saber de las mascarillas y su desinfección
Limites de cada tipo de mascarilla

Lo primero que debes saber es que existen mascarillas que admiten ser reutilizadas y otras que no. En principio, las quirúrgicas no serían reutilizables, sino desechables. Esas mascarillas no deberían superar las 6-8 horas de uso, siempre que no estén mojadas o sucias. Por tanto, se deberían tirar tras ese tiempo y ser sustituidas por otra limpia.
En cambio, hay otras mascarillas de tela que admiten ser lavadas un número de veces concreto. Normalmente ronda los 5 o 6 lavados. Así podrás poderla lavar para la siguiente jornada y que esté desinfectada para volverla a usar. Algunas tienen estructura de tela y un filtro interno que se debe desechar, aunque la parte de tela se pueda limpiar.
Por otro lado se encuentran las autofiltrantes, que no se deberían reutilizar demasiadas veces, pero que admiten cierto grado de reutilización si la desinfección es la correcta. Si se humedece o se trata inadecuadamente el tejido filtrante podría perder sus propiedades.
Además, los expertos aconsejan que el tiempo de uso de esas mascarillas autofiltrantes no debería ser superior a las 48 horas, es decir, 2 días y tirar. Pero por cuestiones económicas o de falta de stock, muchas personas las tienen que alargar más allá de esas recomendaciones…
Consecuencias de una mala desinfección

Si se intenta lavar con agua o de forma inadecuada una mascarilla que no está hecha para eso es posible que la humedad estropee el tejido filtrante y su efectividad sea más baja tras la desinfección o que sea prácticamente nula. Por tanto, de poco servirá hacerlo, ya que estarás tan desprotegido como no llevándola.
Por tanto, siempre respeta las indicaciones del fabricante y las recomendaciones de los expertos. Por ejemplo, las autofiltrantes no se deben lavar ni humedecer, porque el tejido perdería sus propiedades. Solo se deberían desinfectar en su zona de contacto con la cara y nariz.
Por otro lado, también podría ocurrir que la desinfección no sea la adecuada. Que apliques algún tratamiento que consideres seguro y realmente no estés desinfectando las mascarillas con él. En ese caso, seguirán estando sucias o con virus, por lo que se considerarían peligrosas para volverla a usar. Por ejemplo, algunos las pulverizan o las frotan con alcohol o lejía, lo que podría no ser correcto.
Para que nada de eso ocurra deberías leer las siguientes recomendaciones…
Pasos para desinfectarla de forma adecuada

Todavía no está muy claro la forma correcta de desinfectar una mascarilla, incluso los estudios de ciertos científicos se contradicen en ocasiones. Quizás la pandemia y la forma precipitada con la que se están analizando algunas cuestiones tampoco ayude a arrojar luz…
Pero resumiendo, a no ser que sean de tela lavables, lo ideal es no reutilizar las mascarillas y darle un solo uso.
Métodos de desinfección
Ahora bien, si lo tienes que hacer, para desinfectarlas podrías usar distintos métodos:
- Reutilizables higiénicas y lavables de tela: respeta siempre el número máximo de lavados del fabricante (unas 5 o 6 veces). Para una correcta desinfección puedes meterlas en la lavadora, usando el detergente habitual, y usando un programa a 60ºC o más. Otra forma de hacerlo, según el Ministerio de Sanidad, es sumergir las mascarillas en una disolución de lejía-agua tibia (proporción 1:50) y esperar 30 min.
- Higiénicas y quirúrgicas de un solo uso: aunque no sea lo mejor, se pueden desinfectar para volverlas a usar de varias formas. Si la has usado por 4-6 horas debería ser su ciclo de vida máximo, pero si ves que no está húmeda ni sucia y quieres volver a usarla en otro momento, entonces lo mejor para no dañarlas es simplemente tenderlas durante 7 días al sol antes de volver a usarlas. Según un estudio de The Lancet Microbe, tras ese tiempo los virus del SARS-CoV-2 se habían reducido hasta un 0.1%.
- Autofiltrantes: tampoco se recomienda reutilizar, pero se podrían desinfectar con métodos en los que se aplica calor a 70ºC, someterlas a luz UV germicida, vapores de agua oxigenada, etc. No se aconseja someterlas a más de 160ºC ni tampoco usar agua y jabón, lejía, etc., ya que alteraría sus propiedades. Son métodos que no se pueden hacer en una casa, lo único que sí se podría hacer es poner la mascarilla dentro de un horno a 70ºC durante unos 30 min, según un estudio de la Universidad de Standford. Estos métodos no alterarían demasiado su filtro y matarían los microorganismos, aunque es posible que si los sometes a varios procesos se terminen deteriorando y no se ajusten bien a tu rostro.