A rey muerto, rey puesto, o reina. Y es que no hace tanto Pablo Díaz conseguía por fin el ansiado e histórico bote, entre sospechas de tongo, y con la nueva protagonista del programa, Sofía Álvarez, está ocurriendo algo parecido. ¿Es por tanto algo recurrente en ‘Pasapalabra’ para favorecer a un concursante concreto y que se mantenga y acumule hasta que «interese» que consiga el rosco?
La audiencia del programa está siempre muy atentan a irregularidades, beneficios o sospechosos tratos de favor de unos sobre otros para crear así otro referente del programa que de la audiencia que dio por ejemplo Pablo.
UN PREMIO INCREÍBLE BAÑADO EN SOSPECHA

Desde hace meses se hablaba en redes sociales del trato de favor que se le hacía a Pablo Díaz en ‘Pasapalabra’, para algunos descarado. Y es que el concurso de Antena 3 es líder de audiencia en parte por el enganche que supone que un concursante se mantenga durante semanas y semanas y siempre esté a punto de conseguir el rosco, sin conseguirlo, acumulando más y más dinero hasta que un buen día logra un dineral.
Muchos lo tienen claro: Pablo Díaz, como pasó con otros concursantes, daba audiencia y por eso lo mantenían. De hecho, tras su marcha han bajado las cifras y necesitan o un sustituto, o en este caso sustituta, y vuelta a empezar, con los mismos tratos de favor hasta el rosco que le de un triunfo apoteósico. Entre tanto, una y otra vez muchos seguidores denuncian como, mientras al que favorecen le ponen roscos de Primaria, al contrincante le colocan definiciones y palabras que ni un un miembro de la Real Academia. Es lo que estaría ocurriendo también con Sofía. Pero, ¿tiene fundamento o son solo elucubraciones? Pues a tenor de lo que se le escapó a Pablo Díaz, parece que sería lo primero…
LA POLÉMICA Y SOSPECHOSA FRASE DE PABLO DÍAZ

Ocurrió en uno de los programas de ‘Pasapalabra’ y en otro de los roscos que protagonizaba el que parecía imbatible y a la postre lo fue, Pablo Díaz. Semanas antes de este hecho estuvo a punto de llevárselo, pero le faltó una letra. Seguía acumulando dinero en espera de poder un día completarlo y llevarse el gran bote. En el camino habían caído concursantes de la talla de Marta y ahora se las veía con otro crack de los concursos como era Javier Dávila, que ya en la etapa de Telecinco llegó a eliminar a Marta Terrassa.
Todo ello parecía indicar, a pesar de la valía del tinerfeño, que lo iba a tener complicado y que no las tenía todas consigo. Sin embargo, Pablo Díaz incendió Twitter con una frase en pleno programa, no sabemos si por un lapsus o por su arrolladora seguridad en si mismo. Díaz no dudó en decir “el día que me lleve el bote”, dando a entender de que era imposible que lo eliminaran y que se acabaría llevando el ansiado premio, como así fue al final. Un motivo más para que la audiencia le cogiera ojeriza y pensaran que todo estaba amañado y preparado, pero no sólo por ese lapsus, sino por hechos.
A PARTE DEL PÚBLICO SE LE ACABABA LA PACIENCIA

Por ello y otras razones que vemos ahora, muchos seguidores de ‘Pasapalabra’ dejaron de apoyar a Pablo Díaz, como quizá empiecen a hacer muchos con Sofía. Más allá de las sospechas, desplantes, polémicas, etc., también se denunció en Twitter la poca dificultad de muchas definiciones y palabras en los roscos de Pablo, lo mismo que ocurre ahora con Sofía Álvarez.
Muchos así daban por hecho que tarde o temprano sería él y sólo él quien se llevaría el rosco y con ello el jugoso bote. El tiempo les dio la razón. Muchos lo tienen claro: hacer crecer la incertidumbre y la emoción, alargamiento artificial para acumular más bote y consecución más noticiable y viral.
SOFÍA, LA NUEVA «APUESTA» DE ‘PASAPALABRA’

Tras Pablo Díaz, por tanto, ‘Pasapalabra’ tiene nueva promesa, sobre todo tras la eliminación de otro histórico como Javier Dávila. Dos grandes que de repente ya no están y por tanto hay que revitalizar el formato para no perder audiencia. Sofía Álvarez sería la elegida y de hecho ya ha estado en varias ocasiones cerca de completar el rosco. Una dinámica que nos suena de otras ocasiones, mientras acumula dinero y va repitiendo programa tras programa.
Sofía es una vasca de 55 años de Getxo (Vizcaya) y que reside en Bilbao. Es una reputada psiquiatra que trabaja en un hospital de la capital vasca. Al presentarla, nos contó que tenía dos hijos de 24 y 28 años, y que le encantaban las palabras. Sin duda, está en el concurso ideal, por tanto, y así lo está demostrando.
SIGUE LA SENDA DE GRAN AUDIENCIA

‘Pasapalabra’ volvía a presumir de grandes datos de audiencia. Sigue siendo líder en la competitiva franja horaria que compite y Mediaset no ha sido capaz con ninguno de sus intentos, fueran programas, concursos o series, de desbancar y ni siquiera acercarse al programa que presenta Roberto Leal. Algo que duele aún más cuando precisamente Mediaset es la que emitía hasta hace unos meses el formato pero tuvo que renunciar a él tras perder judicialmente los derechos.
‘PASAPALABRA’ NECESITA UN CONCURSANTE REFERENTE

Es sin duda un elemento clave de ‘Pasapalabra‘: que el concursante sea reconocido por la audiencia y desee verle superar programa a programa, estar cerca del rosco y finalmente conseguirlo, con un premio cuanto más grande mejor. Tiene su lógica en términos de interés y audiencia, y así ocurre al final. Por eso muchos se han percatado de cómo el programa se decanta claramente por uno de ellos, en este caso sería por Sofía.
Cuanto más cariño le tienen los espectadores a un concursante más audiencia genera y para ello tienen que durar. Si sumamos a ello que tras ganar Pablo Díaz las cifras de espectadores bajaron y al tener en Sofía una candidata firme al nuevo premio, explican los sospechosos roscos fáciles a los que se enfrente la vasca.



















