Viajar por Europa puede ser uno de los placeres más grandes de los aventureros. Europa cuenta con una amplia variedad de rincones secretos, paisajes que pueden embelesar hasta el más escéptico. Playas, montañas, edificios, monumentos históricos únicos y más. Sin embargo, detrás del amplio continente también existen historias macabras, relatos de lugares que prefieren ser olvidados. Hay algunos espacios donde la entrada está prohibida y lo que sucedió en ellos es mejor no recordar.
Aunque parezca increíble, un territorio tan lleno de historias trascendentales para la humanidad esconde secretos que pocos conocen y que prefieren no sacar a la luz. En Venecia, a un vuelo de dos horas de Madrid, uno de los sitios turísticos más importantes del mundo, se esconde una de los lugares más terribles de Italia y que, aunque quisieron prohibirlo, los más aventureros lograron descubrirlo y explorar allí parte de su temible pasado.
Poveglia, la isla más aterradora de Europa
La laguna de Venecia en Europa esconde detrás de sí una macabra historia. Más allá de su pintoresco centro histórico, con góndolas y balcones de colores, se esconde una isla olvidada. Poveglia tuvo un rol esencial durante la expansión de la «peste negra» en los siglos XVIII y XIX. Allí se escondían los infectados por esta enfermedad y, aunque tenían pocos síntomas, eran trasladados allí para evitar el contagio. En ese sitio murieron miles de personas que fueron enterradas en fosas comunes y los más conspiradores aseguran que el suelo está compuesto de cadáveres.
El gobierno italiano enviaba a los contagiados por esta patología o los que presentaban síntomas a este sitio para evitar la proliferación de esta enfermedad que provocó la muerte de muchas personas en esa época. Allí no sólo se los dejaba morir, sino que los incineraban también para cualquier tipo de rastro. Además de muchas otras historias macabras, este sitio quedó finalmente cerrado al público en 1968. Los que quieren ingresar allí pueden hacerlo sin restricciones, pero deben encontrar las personas que quieran trasladarlos hasta el lugar.
Un hospital psiquiátrico y la historia más triste de la isla más peligrosa de Europa

Una vez disipado el fantasma de la peste negra en Europa, el gobierno de Italia definió que en este lugar se construya un hospital psiquiátrico, lo que aumentó aún más su posición aterradora ante los ojos del mundo. En 1922 comenzó a funcionar esta institución que, según la leyenda, estaba dirigida por un médico que experimentaba con los internos, haciendo estudios escalofriantes e inhumanos. Esta persona terminó suicidándose debido a los tormentos de todo lo que allí realizó. Más allá de este espacio para la salud mental, en Poveglia los mitos y leyendas abundan.
Los aventureros que se animaron a conocerla, o estudiar sus rastros, aseguran que allí se escuchan voces, que las almas de los que murieron siguen dominando la isla. A pesar de los intentos por recuperarla y darle otro significado, este territorio se encuentra maldito y nadie pudo poder resucitarlo para convertirlo en un sitio de interés turístico, a pesar de su triste historia. Ahora, sólo los más valientes se animan a visitarla, aunque las autoridades no permiten la permanencia allí y los vecinos no se atreven a pisarla.
Los valientes: así fue la expedición de dos turistas que fueron a la isla más temida de Europa

Hace algunos años atrás, la historia de Poveglia se hizo popular en redes sociales debido a dos turistas ingleses que eligieron visitarla y compartir su experiencia en su canal de YouTube. Las dos personas encontraron allí restos del hospital abandonado y también algunas casas que fueron descomponiéndose con el tiempo y por los efectos del clima. El paseo por este lugar fue angustiante para los turistas, quienes confirmaron que sucedieron algunos hechos espeluznantes como sonidos extraños.
Tal como revelaron estos exploradores, la triste historia de este lugar se puede percibir allí, donde el abandono es una clara señal de lo que sucedió. La sensación de angustia es constante y hasta se escuchan voces. «Mientras estábamos allí, escuchamos el sonido de una campana. Fue como un presagio o algo así. Todo el lugar era realmente extraño y espeluznante, aunque se podía ver por las baldosas y los arcos que originalmente habría sido un edificio hermoso», dijeron los turistas ingleses en sus redes sociales.
Los sitios prohibidos por fuera de Europa

Esta isla de Europa no es la única en la que la entrada está prohibida. Existen también otros sitios por fuera del continente cuyos efectos de la naturaleza, los animales que viven allí o los mismos habitantes hacen que no sea agradable una visita. Una de ellas es la Isla Queimada Grande en Brasil, conocida como la Isla de las Serpientes. En este lugar crece y se desarrolla la conocida como la víbora dorada ( Bothrops insularis y Dipsas mikanii), una de las más peligrosas del mundo por lo que el gobierno de ese país prohibió el ingreso del turismo.
En este territorio la existencia de esta serpiente puede implicar un peligro para los visitantes y también para su propia especie que se encuentra en peligro de extinción. Este lugar no posee playas y se encuentra a 35 kilómetros de la costa sur del estado de São Paulo, entre Itanhaém y Peruíbe. Los únicos que tienen permitido su ingreso son los profesionales ambientales autorizados por la Marina brasileña. Un lugar lleno de misterios y peligros para los curiosos.
Santuario de Ise en Japón, otro de los sitios más misteriosos fuera de Europa

Lejos de cualquier historia macabra, el Santuario de Ise en Japón es considerado un lugar sagrado en el que sólo se permite el ingreso de unos pocos. Los sacerdotes y sacerdotisas sintoístas de alto rango, así como los miembros de la familia imperial japonesa, son los únicos que pueden entrar a este mágico lugar. Las personas creyentes pueden acercarse a él pero no conocerlo por dentro, por lo que organizan visitas para los que quieren conocer su historia.
Este santuario tiene una particularidad que pocos poseen y es que se derriba y se reconstruye una vez cada 20 años. Este espacio es tan especial porque hace referencia a los orígenes místicos de Japón y está consagrado a Amaterasu Omikami, la diosa del sol y la deidad de la religión sintoísta. Tal como cuenta la leyenda este sitio cuenta con un espejo sagrado, un objeto valioso para la cultura nipona, uno de los tres tesoros más valiosos de Japón al que nadie tiene acceso.

 
                         
                        













 
                        




 
                        












 
                        




 
                        




 
                        








 
                        






 
                        

 
                        
 
                        
 
                        








 
                        


 
                        
 
                         
                         
                         
         
         
         
         
         
         
         
                        


 
                        




 
                        








 
                        




 
                        








 
                        


 
                         
                        

 
 



