Los trabajadores de Holaluz han conseguido doblegar a la dirección de la compañía, que ahora está dispuesta a transigir con más «flexibilidad» a cambio de esquivar los tribunales, al menos de momento.
Fuentes sindicales han contado a MERCA2 que incluso está habiendo «presiones» para que CGT acepte una solución intermedia y suspenda la demanda interpuesta contra la empresa por su decisión de eliminar el teletrabajo y otros beneficios laborales.
La pasada semana se supo que un juzgado de lo social de Barcelona había citado a la cúpula de Holaluz el 25 de junio con motivo de dicha demanda. Intencionado o no, el timing de la citación judicial no pudo ser más certero: justo al día siguiente, el 26 de junio, tendrá lugar la junta general de accionistas en la que se someterá a votación la reelección como consejeros de Carlota Pi, presidenta y fundadora de la compañía, y sus adláteres Ferrán Nogué y Oriol Vila.
«Parece que Holaluz quiere que suspendamos el juicio y está ofreciendo a la plantilla más flexibilidad», relatan las fuentes, que sin embargo desconfían de la dialéctica de la empresa: «ofrecen más ‘flexibilidad’ los viernes, permitiendo el trabajo en remoto pero con condiciones; nos parece muy ambiguo».
LA LUCHA DE LOS TRABAJADORES DE HOLALUZ DA FRUTOS
Holaluz inició 2025 realizando una Modificación Sustancial de las Condiciones de Trabajo que eliminó, de forma unilateral, algunos beneficios adquiridos por sus empleados, como el teletrabajo. La extinción de los acuerdos desembocó en una huelga declarada el pasado 14 de enero con el amparo de UGT y CGT, consistente al principio en paros parciales durante dos horas por la mañana y dos horas por la tarde, todos los martes y jueves.
Ante el inmovilismo de la compañía, esta moderada estrategia dio paso a los tambores de guerra total. Holaluz, explican, asumió la táctica de ‘lo tomas o ahí está la puerta’ con los empleados, lo que se tradujo en la baja voluntaria de 85 trabajadores. A este éxodo se le sumaron varios despidos a finales de febrero.
A PRINCIPIOS DE AÑO, HOLALUZ ELIMINÓ UNILATERALMENTE EL TELETRABAJO Y OTROS BENEFICIOS LABORALES, ADOPTANDO LA TÁCTICA DE ‘LO TOMAS O AHÍ ESTÁ LA PUERTA’, LO QUE DESEMBOCÓ EN 85 BAJAS VOLUNTARIAS Y VARIOS DESPIDOS
Además, muchos empleados han tenido que soportar una congelación salarial que en algunos casos dura «más de tres años», según relataron en su momento a MERCA2 las mismas fuentes. Un asunto especialmente sangrante, habida cuenta que en plena crisis, la cúpula directiva se subió el sueldo un 20%, según la auditoría de las cuentas 2023 de la empresa, realizada por Ernst & Young (EY).
Actualmente, Holaluz tiene encima una demanda colectiva y una denuncia interpuesta ante Inspección de Trabajo por supuestas presiones contra los trabajadores que decidieron secundar los paros. Con su voluntad manifiesta de negociar, la dirección de la empresa demuestra que le tiene «miedo» a estos procesos judiciales, dicen las fuentes.
MUCHO QUE PERDER EN LA GUERRA CON LOS SINDICATOS
Carlota Pi y su equipo tienen todas las de perder, y lo saben. Y es que la jurisprudencia del Tribunal Supremo sobre el asunto favorece las reivindicaciones de los trabajadores: en una sentencia del 2 de abril, el máximo órgano jurisdiccional español rechazó que las empresas puedan revocar el trabajo en remoto de forma unilateral, considerando dicha decisión abusiva y contraria a derecho.
Holaluz quiere evitarse una derrota judicial sonrojante ahora que empieza a ver la luz al final del túnel. El pasado 10 de marzo, la compañía dio un paso de gigante en su salvación financiera con el anuncio de un acuerdo para reestructurar la deuda que la ha tenido al borde del concurso de acreedores.
La comercializadora informó al BME Growth, índice bursátil en el que cotiza, de la consolidación de un «plan de reestructuración» de su deuda financiera. La refinanciación incluirá «préstamos, instrumentos de circulante, pagarés MARF y avales», y ha contado «con la aprobación de las entidades financieras acreedoras con una mayoría que excede ampliamente las exigidas por la legislación de aplicación».
HOLALUZ QUIERE EVITARSE UNA DERROTA JUDICIAL SONROJANTE AHORA QUE HA CONSEGUIDO REESTRUCTURAR SU DEUDA Y SALVARSE DEL CONCURSO DE ACREEDORES GRACIAS AL ‘CABALLERO BLANCO’ ICOSIUM INVESTMENTS
La compañía recibió un salvavidas decisivo en noviembre con la incorporación de un nuevo socio estratégico, Icosium Investment, que trae bajo el brazo una inversión de 22 millones de euros.
La inversión de este ‘caballero blanco’ se realizará en dos fases: en la primera, Icosium obtiene el 14,12% del capital y se incorpora al consejo de administración de la empresa con dos asientos. De este modo, la nueva inversora ocupará el vacío dejado por los fondos ‘díscolos’ Axon y Geroa, desalojados tras una guerra interna con los fundadores.
En la segunda fase, Icosium inyectará 15,52 millones mediante un préstamo convertible a 2,10 euros por acción, adquiriendo un tercer asiento en el consejo de administración y alcanzando el 33,43% del capital.