En España, el cambiar la hora es una práctica habitual que ocurre dos veces al año, en primavera y otoño, conocida como el horario de verano y el horario de invierno, respectivamente. Este cambio tiene como objetivo principal aprovechar mejor la luz solar y ahorrar energía. Sin embargo, esta medida ha generado debate sobre su efectividad y sus repercusiones en la salud, el medio ambiente y la economía. Algunos argumentan a favor de mantener un horario fijo durante todo el año para evitar los trastornos en los ritmos biológicos y mejorar la eficiencia energética de manera sostenible. A lo largo de este artículo respondemos a todo: ¿cuándo nos toca cambiar la hora? ¿Hay que adelantar o atrasar el reloj?
1Al llegar la primavera, en España se suele cambiar la hora
Con la llegada de la primavera, en España se lleva a cabo el cambio de hora, adelantando los relojes una hora en el último domingo de marzo. Este cambio marca el inicio del horario de verano, una práctica destinada a aprovechar al máximo la luz natural durante las tardes, fomentando así el ahorro energético y aumentando la sensación de aprovechamiento del día. Sin embargo, este ajuste temporal también ha generado controversias debido a sus posibles efectos en el ritmo circadiano, el descanso y la adaptación de las personas a los nuevos horarios.