Las start-ups con un director financiero externo acumulan más beneficios

La gestión financiera es fundamental para alcanzar el éxito. Sin embargo, esta puede resultar compleja durante los primeros años de existencia de una empresa. Frente a esta situación, lo más recomendable es contratar a un Director financiero para startups que pueda mejorar el rendimiento operativo y sentar las bases para el crecimiento futuro.

¿Por qué es tan importante la dirección financiera de una start-up?

En la actualidad, los avances tecnológicos ofrecen una multitud de ventajas para el desarrollo profesional y empresarial. Sin embargo, la proliferación de empresas nuevas y start-ups de gran rendimiento produce un mercado en el que la competencia es muy alta.

En este sentido, la gestión eficaz de los recursos económicos y financieros de las nuevas empresas se constituye como un factor fundamental para alcanzar el éxito y prevalecer frente a un escenario de incertidumbre económica y competencia feroz con otros agentes del mercado.

Pese a ello, la mayoría de las start-ups no disponen de los medios ni el capital necesario para costear a un director financiero interno que pueda mantener una gestión eficaz de los recursos de la empresa a corto, mediano y largo plazo: una tarea que resulta indispensable para sentar las bases del crecimiento futuro.

¿Por qué resulta tan eficaz la dirección financiera externa?

Existen múltiples razones y ventajas que derivan de la contratación de un director financiero externo. Entre las principales, destaca el aspecto económico: el costo de este servicio resulta marginal en relación con los beneficios que conlleva en cuanto a optimización de procesos y rendimiento comercial.

Por otro lado, supone la incorporación de un asesor con experiencia en la materia, lo que ofrece la posibilidad de contar con conocimientos prácticos y actuales sobre las condiciones del mercado y el desarrollo de las posibles estrategias a implementar. Se trata de un tipo de asistencia integral que comprende un análisis global del estado de la empresa y el sector en el que esta se inscribe.

Otro gran atractivo de este modelo de dirección externa consiste en la posibilidad de confeccionar un plan financiero a largo plazo, en función de los objetivos planteados, los recursos a disposición y las acciones necesarias para utilizarlos de manera eficiente. En este sentido, el aporte de un profesional con trayectoria resulta determinante.

¿En qué consisten las tareas del director financiero?

Con base en lo planteado, muchas start-ups reconocen las ventajas de recurrir a un director financiero externo. Se trata de una figura empresarial cuya actividad consiste en prestar servicios de gestión financiera en función de las necesidades de una determinada empresa y sus características particulares.

Entre las principales funciones de este profesional se encuentran:

  • La capacidad de optimizar el empleo de los recursos y tareas de gestión
  • La proyección un plan financiero a corto, mediano y largo plazo
  • El análisis de los resultados de las estrategias
  • La asistencia a la toma de decisiones
  • La producción de informes de rendimiento sobre las operaciones de la empresa

La presencia del CFO externo para start-ups permite obtener un análisis riguroso de la situación de la empresa para determinar sus fortalezas y reducir el desperdicio, lo que representa una gran ayuda durante los primeros años de vida de la organización. Gracias a ello, los directivos pueden disponer de un informe integral sobre los distintos aspectos financieros y contables de la empresa.

En definitiva, recurrir a un director financiero para startups representa una solución de gestión accesible que permite mejorar considerablemente el rendimiento de la empresa, optimizar los procesos y sentar las bases de desarrollo a corto, mediano y largo plazo.