Espirituosos España ha aclarado este lunes que las eventuales roturas de stock de bebidas espirituosas no son generalizadas y ha precisado que son consecuencia de la crisis mundial en el transporte, que afecta al comercio internacional y al aprovisionamiento de materias primas. De esta forma, Espirituosos España desmiente «categóricamente» que esta situación coyuntural se deba a un aumento exponencial del consumo, sino a problemas derivados de la inestabilidad en los mercados.
Tras pasar lo peor de la pandemia, la recuperación del sector se está viendo ahora lastrada por una «enorme inestabilidad» en los mercados, una crisis mundial en el transporte que afecta a las importaciones y exportaciones, y también al aprovisionamiento de materias primas.
Desde Espirituosos España han insistido en que la actual coyuntura no es consecuencia de un aumento de consumo, sino derivada de una crisis de transporte y materias primas.
«Los casos de roturas de stock, no se están produciendo por un aumento exponencial de consumo. Es más, aún queda mucho camino para recuperar los niveles preCovid, algo que en ningún caso se vislumbra alcanzar hasta 2023, y ello además dependerá de los planes de recuperación antes mencionados. Hay que recordar que la crisis económica de la que nos estábamos recuperando hasta que apareció el Covid, redujo las ventas de espirituosos por encima del 30%», han señalado desde Espirituosos España, que han señalado que el encarecimiento y la limitación de las fuentes de energía y el posBrexit han tensionado «gravemente» el comercio internacional.
Desde Espirituosos España han confiado en que esta situación sea coyuntural, al tiempo que han agradecido las gestiones que se están haciendo en materia de aprovisionamiento y costes de la energía. No obstante, han considerado que sería necesario que el Gobierno incluyera también la carestía de las materias primas, la crisis del transporte y la agilización de los procesos aduaneros en ese mismo horizonte.