Más cruda, más pasada, con o sin cebolla, con otros ingredientes adicionales o sin ellos para los más puristas… los gustos y preferencias por este plato de la gastronomía española son de lo más diverso. Sin embargo, en lo que todos estarán de acuerdo es que la tortilla de patatas es toda una delicia.
Pero, a pesar de su popularidad y lo aparentemente sencilla que parece, son muchas las dudas sobre cómo preparar esta receta de la forma correcta, las proporciones huevo/patata óptimas, cómo voltear la tortilla de forma segura y fácil para los más principiantes, etc. En definitiva, se podría escribir toda una enciclopedia sobre este manjar…
5La forma tradicional (con plato)
La forma tradicional de darle la vuelta a la tortilla de patatas es usando un plato. El plato empleado debe ser plano, con algo de borde para evitar que se derrame si hay algo líquido. Además, muchos piensan que debe ser de un diámetro más grande que la sartén, y eso no es del todo correcto. Lo óptico es un plato que sea mayor que el diámetro de la tortilla de patatas, pero que pueda entrar algo en la sartén. Así, al darle la vuelta, el plato estará más cerca de la tortilla y no caerá.
Para el procedimiento del volteo, tan solo se pone el plato sobre la tortilla. Se sujeta con firmeza el plato, y con ayuda del mango de la sartén se procede a dar la vuelta en un movimiento rápido y brusco, ya que si lo haces despacio puede derramarse el contenido líquido. Una vez la tortilla repose en el plato, puedes devolverla a la sartén del otro lado dejando que deslice por el plato.
